Los cinco sindicatos de educación acordaron el viernes nuevas medidas de movilización, surgidas de las asambleas comarcales unitarias realizadas esta semana en contra de los ajustes económicos del Consell, entre las que destaca el cierre de los centros educativos para el próximo martes, según adelantaron ayer en un comunicado. Los sindicatos han propuesto que durante los cierres de los colegios, el profesorado invite a los padres y madres y se organicen asambleas informativas y talleres de pancartas con el lema de la campaña 'No a los recortes en los servicios públicos. Depuración de responsabilidades en el Consell'.

Además, también se ha solicitado coordinación en los barrios y localidades para convocar concentraciones y manifestaciones de todo el personal de la función pública y de la ciudadanía. El objetivo es que no se solapen en las convocatorias generales, como han acordado hacer en Gandía el 1 de febrero y en Alzira el 8 de febrero. Los sindicatos de la enseñanza también han acordado asistir el mañana con camisetas negras al puesto de trabajo y denominarlo 'Lunes de luto'. Además, habrá concentraciones de cinco minutos en la puerta de los colegios todos los jueves a las 12:00 horas.

Los responsables de los sindicatos han solicitado la asistencia a la manifestación convocada para el jueves 26 de enero en Alicante, Valencia y Castelló, a partir de las 18:30 horas. Además de la recogida de firmas en las que se exija la dimisión del conseller de Hacienda, José Manuel Vela.

Por último, el 27 de enero, en la reunión unitaria de todos los sectores de la función pública, los sindicatos de educación propondrán otras medidas surgidas en las asambleas "para que también las asuman los sectores de sanidad, justicia y función pública". La intención es hacer concentraciones en el Aeropuerto de Castelló, en Ciutat de las Artes y las Ciencias de Valencia, en Terra Mítica, en la depuradora de Pinedo o la Ciudad de la Luz en Alicante, entre otros lugares.

UPyD

La organización política UPyD de Castelló manifestó ayer en un comunicado que "la calidad de los servicios esenciales como son la educación y la sanidad entre otros, deben prevalecer por encima de las nefastas gestiones realizadas por el gobiernos de Generalitat, con gastos desorbitados en obras faraónicas y de dudosa rentabilidad".