Carlos Fabra continuará un tiempo al frente de la sociedad autonómica que gestiona el aeropuerto de Castelló (Aerocas), a pesar de sus imputaciones judiciales y del futuro incierto de la infraestructura tras la salida de la concesionaria. El presidente del Consell, Alberto Fabra, descartó ayer el cese de Fabra de Aerocas y afirmó que el relevo en la presidencia de dicha entidad "no es una prioridad" del Consell.

"Tenemos muchos temas que nos preocupan y dentro de la dificultad económica y la necesidad de pagar a proveedores y tomar medidas y ajustes necesarios, este tema no es nuestra prioridad", subrayó en declaraciones a los periodistas al finalizar el consejo de administración de la Autoridad Portuaria de Castelló.

Mariano Rajoy rescatará en el próximo Congreso Nacional del PP el código ético interno por el que obligará a los dirigentes implicados en casos judiciales a dejar su cargo público. La nueva "Carta de Compromisos" que los populares prevén aprobar indica que todo dirigente debe "poner a disposición del partido el cargo público que ostente".

Posible interés extranjero

Alberto Fabra eludió concretar una fecha de apertura del aeropuerto -inicialmente se había previsto para abril-, insistió en que no "se desecha ninguna opción" para la gestión y subrayó el interés en comprar el aeropuerto de grupos de inversión extranjeros, tal como avanzó Carlos Fabra recientemente, aunque puntualizó que todavía no se ha materializado ningún acuerdo. Señaló que buscarán la "manera más económica" para ponerlo en marcha y recordó que la clausurada compañía de Spanair había recibido 150 millones del Govern català, "más de lo que ha costado el aeropuerto de Castelló".