El edil de Fiestas en el Ayuntamiento de Vila-real, Xus Sempere, aseguró ayer que el Casal de Fiestas acogerá sin problemas el festival previsto para el próximo día 1 de septiembre dentro de los festejos patronales de la Mare de Déu de Gràcia donde actuará como cabeza de cartel el grupo catalán La Pegatina, ya que esta infraestructura dispondrá de la licencia de actividad necesaria para realizar actos que requieran el pago de una entrada.

En Nochevieja se tuvo que trasladar de ubicación la fiesta organizada por la Comissió de Penyes a pesar de que meses antes y durante el mandato del PP, en abril de 2011, el Casal de Festes acogió la actuación de Carlos Baute y los asistentes que compraron una entrada pagaron 20 euros.

El alcalde de la localidad, José Benlloch, aseguró que este edificio es otro de los "empastres" del mandato del PP ya que se "invirtió un millón de euros del Plan E en la remodelación del Casal que se inauguró hace un año y medio y, todavía carece de la licencia de actividad. De hecho, tras esta remodelación hemos tenido que realizar otras reformas y obras para poder obtener este permiso".

De esta forma, el consistorio empezó a trabajar en las mejoras de la infraestructura hace varios meses para poder atender a las exigencias de la Generalitat, una de ellas, un plan de insonorización para evitar incidentes en este local, que ya fue denunciado por un vecino por problemas de ruidos.

El primer edil de la localidad también respondió a las críticas realizadas por el partido de la oposición sobre la situación económica del consistorio en las que aseguraban que la última aplicación de los remanentes de 2011 aprobada podría suponer la intervención municipal por parte del Ministerio de Hacienda.

"Lo único que señala el informe de Intervención al que aludió el exconcejal de Hacienda del PP, Ignasi Clausell, para crear alarma sobre una situación económica de la que es uno de los máximos responsables ya que bajo su gestión el endeudamiento municipal se incrementó en un 525 por ciento, es que tendremos que reequilibrar el plan de ajuste debido a los 1,9 millones de euros en facturas correspondientes a los años 2008, 2009 y 2010 que no entraron por registro municipal hasta el pasado mes de mayo, cuando ya se había entregado el plan de ajuste al ministerio", aseguró Benlloch que indicó que recortarán gastos donde sea necesario "sin tocar a empleados y servicios públicos".

Benlloch afirmó que tenían dos opciones. "O pagábamos ahora estos 1,9 millones o aplicábamos los 1,8 millones de remanentes a las pequeñas obras viarias que mejoran la vida de los vecinos, incrementar las ayudas sociales, dar ayudas a material escolar, pagar las nóminas, ayudar a la Asociación de Familiares de Enfermos de Alzheimer para abrir el centro en septiembre o celebrar las fiestas de septiembre" finalizó el alcalde quien instó al PP a presentar "alternativas" y decir que cosas "no habría hecho".