La bicicleta es sin duda el mejor aliado del ciudadano. No contamina, no provoca ningún ruido y se puede aparcar en casi todas partes. Sin embargo, el mal uso que están haciendo algunos conductores ha llevado a la Policía Local de Benicarló a establecer controles para aplicar la ordenanza de tráfico de la ciudad. Y es que cada vez más se están detectando infracciones por parte de los ciclistas que ponen en peligro a los peatones. El caso más significativo es la circulación de bicicletas por las aceras.

Las persistentes quejas vecinales motivaron la puesta en marcha de una campaña de control que ha durado dos semanas. A lo largo de toda la campaña se han controlado un total de 51 ciclistas, uno de los cuales ha sido denunciado por incumplimiento de la Ordenanza de Tráfico .

Los agentes han controlado sobre todo la circulación de bicicletas por las aceras y en otras zonas reservadas a peatones. En este sentido, aceras como las del paseo de la Mar Chica se han convertido en auténticos carriles bici, mientras que zonas como la plaza de la Constitución suponen un verdadero riesgo para los transeúntes debido a la conjugación de exhibiciones de monopatines y bicicletas que allí concurren.

Los malos hábitos nada tienen que ver con grupos de edades, ya que si habitualmente se señala a los más jóvenes como los presuntos responsables en pocas ocasiones son adolescentes los que participan en las carreras ciclistas que se suben en el primer tramo de la avenida Papa Luna de Peñíscola donde a pesar de haberse suprimido el carril bici, siguen.