El picudo rojo continúa sin estar bajo control en la ciudad de Castelló y, tras aparecer en 2007, vuelve a rebrotar en palmeras de la avenida Capuchinos de Castelló. El Ayuntamiento de Castelló ha empezado a sustituir 28 ejemplares afectados por esta plaga.

Los técnicos municipales han optado por replantear una nueva especie de palmera que consideran más resistente contra el picudo como la datilera (los árboles eliminados son de tipo canario), según fuentes municipales. De momento no hay constancia de que la plaga se haya propagado a otros lugares de la ciudad.

Es la tercera vez que el ayuntamiento lucha contra el picudo en Capuchinos, una actuación que tiene un elevado coste, dado que cada nueva palmera tiene un presupuesto de 12.000 euros y su mantenimiento es de 400 euros al año, según cifras estimadas por la Asociación de Jardineros Profesionales de Castelló. Desde el ayuntamiento destacaron que de esta forma se quiere preservar la fisonomía tradicional de la avenida Capuchinos.

La organización de jardineros puso en duda la eficacia e los trabajos de mantenimiento por esta reaparición del picudo. La época estival es el periodo habitual de propagación, pero en otros municipios de la provincia lo han conseguido atajar. "Si desde el principio no se controla la plaga da igual lo que plantes. Habría que llevar a cabo tratamientos más continuos y comprobar qué hacen en otros ayuntamientos", señalaron fuentes de la asociación. Además, apuntaron que se tendría que reconsiderar la replantación de otras especies de árboles en los puntos afectados. "Las nuevas datileras son muy costosas y es más económico un mayor control que una reposición", añadieron.

Y es que el ayuntamiento lleva más de cinco años luchando contra esta plaga, que se ha llevado por delante más de 1.000 ejemplares en Castelló. Las pérdidas superan los 60 millones de euros. El contrato de prevención anual del picudo supone 22.000 euros a las arcas municipales. Ha afectado a la avenida Rei en Jaume, plaza María Agustina, Capuchinos, paseo Buenavista, Sebastián Elcano, y parques de la Panderola y del Puerto.