El PSPV de Castelló criticó ayer "la pasividad y la indiferencia del Gobierno valenciano ante el anuncio del cierre de varios centros que atienden a personas con alguna enfermedad debido el impago y el cese de las subvenciones por parte de la Generalitat Valenciana".

Así, la secretaria de Bienestar Social de la ejecutiva provincial del PSPV-PSOE de Castelló, Rosa Marco, acusó al presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, y a su equipo de gobierno de "lesionar reiteradamente los derechos de las personas enfermas al permitir y consentir el cierre de los centros que les atienden". Además, Marco recordó que "la Conselleria de Bienestar social debe a estos centros las subvenciones de 2011 y 2012" y aseguró que "esto ha provocado que centros, como La Pineda o el centro de Síndrome de Down, no puedan continuar desarrollando su actividad con normalidad y se planteen cerrar definitivamente a partir del mes de septiembre". Sin embargo, denuncian los socialistas, "Fabra sí tiene dinero para la Fórmula 1, para los torneos de golf y para proyectos fantasma como la Ciudad de las Lenguas o Mundo Ilusión que nunca han visto la luz, pero que han costado millones de euros".

Por su parte, el diputado autonómico de Compromís-Bloc, Josep Maria Pañella, afirmó en un comunicado que si la Generalitat Valenciana no paga las subvenciones a los centros de alzhéimer, "quiere decir que ha dimitido de su papel social".