Las obras para mejorar la accesibilidad en el entorno de la estación de trenes de Vila-real que el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) ejecuta en la zona concluirán el próximo mes de septiembre. Fuentes de esta entidad pública explican que "se están ultimando detalles de las obras y tramitando permisos, por lo que esperamos que a lo largo del mes de septiembre estén concluidas", dos meses después del plazo anunciado en un principio.
Desde el ayuntamiento se ha negociado con Adif una modificación y mejora del proyecto que no ha sido aceptada en su totalidad. "Nuestro principal objetivo era y es adecentar el entorno de la estación para que fuera una parada más digna", expresó el alcalde de Vila-real, José Benlloch, que insistió en que "hemos hablado con los responsables del proyecto y seguiremos negociando, pero desde la entidad nos insisten en que se aprobó un proyecto con un presupuesto y no hay dinero para más". No obstante, Benlloch recordó que "sí se han tomado en cuenta" pequeñas modificaciones a propuesta municipal a la hora de ejecutar las obras.
Los trabajos ya han permitido en una primera fase acometer la urbanización de dos nuevos viales próximos a la estación con el fin de descongestionar el tráfico en la zona y facilitar la movilidad, así como la instalación del alumbrado público.
Accesibilidad
Además, a propuesta del concejal de Urbanismo, Emilio Obiol, se procedió a demoler el edificio del antiguo almacén ferroviario, así como el muro de cerramiento de la estación para mejorar las condiciones de acceso al andén y a la futura pasarela.
El primer edil insistió en la importancia de esta actuación para "incrementar la seguridad y eliminar los riesgos que suponían los dos pasos ferroviarios a nivel en el casco urbano". A su vez, añadió que "ésta es una reivindicación histórica de Vila-real a la que quisimos dar inmediatamente respuesta agilizando unas conversaciones con el Gobierno que se remontan al año 2007".
En cuanto a los plazos a la hora de acometer las mejoras en esta infraestructura, el proyecto comenzó a definirse hace cinco años y Adif adjudicó las obras en noviembre de 2009. Tras varios cambios en el proyecto original, el Ayuntamiento de Vila-real aprobó definitivamente en junio de 2010 las actuaciones con un presupuesto aproximado de 1,6 millones de euros, unas obras que están a punto de culminar.
