La sociedad Aeropuerto de Castelló S.A. (Aerocas) adelantó el pasado 12 de julio la rescisión del contrato de cetrería y control de fauna con la empresa Arte Halcón tras conocer las posibles acusaciones judiciales por contrabando y falsificación de certificados de animales exóticos, según confirmó ayer la Vicepresidencia de la Generalitat Valenciana.

Los portavoces del gabinete del vicepresidente José Císcar añadieron que Aerocas no quiere mantener "ningún tipo de relación" con la empresa que ha sido acusada por la Fiscalía de varios delitos vinculados con el trato, posesión y utilización de animales (principalmente aves rapaces y linces europeos).

La investigación de la Guardia Civil (bautizada como operación "Crisálida" culminó el jueves con el registro del núcleo zoológico de Arte Halcón en Peñíscola y con la intervención de 123 animales vivos y otros 20 ejemplares muertos en un arcón congelador.

Entre los animales intervenidos se encuentran varias águilas harris, búhos reales, halcones, águila de Nepal, búho africano y linces europeos. A juicio de los informes de la Guardia Civil,

El acusado -F.O.-, que niega los hechos y está en libertad con cargos, gestiona una empresa (Arte Halcón) que realiza trabajos de cetrería para aeropuertos de distintas provincias y también mantiene un convenio con la Diputación de Castelló para ofrecer espectáculos de vuelo y exhibición de aves rapaces.

Según precisaron fuentes de Vicepresidencia, la dirección de Aerocas ya había planificado rescindir el contrato de cetrería y control de fauna a mediados de agosto -cuanto menos temporalmente-, dada la necesidad de ahorrar recursos y la ausencia de una fecha definida para los primeros vuelos comerciales.

Sin embargo, las filtraciones sobre la investigación judicial de la empresa Arte Halcón S.L. convencieron el pasado 12 de julio a Aerocas de la necesidad de acelerar la eliminación del contrato y de romper cualquier relación futura con la mercantil. Desde 2012, la citada empresa se encargaba del control de la población de conejos y otros animales terrestres (utilizando hurones) y de la disuasión de las aves del entorno de la pista de aterrizaje gracias a aves rapaces entrenadas.

La concesionaria bajo sospecha trabajaba para el aeropuerto en virtud de un contrato que en 2011 salió a licitación por un importe de 450.000 euros a cambio de prestar el servicio durante tres años.

Por lo pronto, el contrato ya ha sido rescindido y Aerocas no baraja buscar un sustituto porque el servicio "no será necesario hasta que no se hayan definido unas fechas para que comiencen a operar los vuelos, y eso es algo que todavía no podemos avanzar", apuntaron los portavoces de la Generalitat.

La diputación no ve ilegalidades

La Diputación de Castelló aseguró ayer que no ha encontrado irregularidades y mantendrá con normalidad la concesión a la empresa para el uso de dependencias del Castillo de Peñíscola, donde la firma ofrece espectáculos de cetrería y cobra el 80% de la entrada

"Las aves están en regla y es

una venganza personal"

l gerente de la empresa Arte Halcón, Fernando Olmos, negó ayer todas las acusaciones de la Fiscalía y de la Guardia Civil y alegó que se trata de una "venganza personal", lo cual habría derivado en la acusación por supuesto contrabando de animales exóticos y falsificación de certificados.

De unos hechos similares ya fue acusado en 2006 tras una denuncia del grupo conservacionista Gecen, la cual fue finalmente archivada "por no aparecer debidamente justificada la perpetración del delito que motivó la formación de la causa". El auto judicial pidió la devolución de los animales incautados y retirados de la finca "La Torre del Rey" en el límite entre Benicarló y Peñíscola y la documentación original incorporada de los 72 animales y restantes objetos.

Según el propietario, en la devolución de los animales se produjeron numerosas bajas y Olmos exigió "responsabilidades" a la Guardia Civil por tal operación. Precisamente señala al propio instituto como "posible responsable" de esta nueva actuación que califica de "agresión en toda regla", porque según dijo "vienen a por mí desde dentro para dejarnos sin aeropuertos y que no vuelva a levantar cabeza". Siete años más tarde, Olmos ha sido de nuevo centro de una nueva operación que califica de "orquestada" en los aeropuertos de Canarias, el de Castelló y el castillo de Peñíscola. Según el empresario, los pájaros "cuentan con los documentos necesarios, los han sometido reiteradamente a análisis de ADN en una de sus plumas sin que consten incorrecciones por parte de la conselleria y los forestales y los aeropuertos realizan auditorías tanto internas como externas periódicas".

Fruto del eco mediático, Olmos ha recibido ya llamadas de Aena y la diputación y ha tenido que insistir en la legalidad de su actuación y actividad. Olmos aseguró tener claro que se trata de una "venganza" y de un "acoso" y confía en que Aduanas, quien regula el movimiento de estas especies, no verá ningún delito. "No lo verán porque todo es legal y hay que anteponer la presunción de inocencia".

De forma paralela, el titular de la empresa y sus servicios jurídicos estudian interponer una denuncia por "la posible comisión de delitos con la divulgación de una nota de prensa antes de que el órgano administrativo oportuno señale si hay o no irregularidades"..