Los impagos de la Generalitat al Ayuntamiento de Forcall han impedido que los trabajadores del geriátrico de la localidad hayan cobrado las nóminas de septiembre y, si no paga la Generalitat, no cobrarán tampoco las de octubre. La Conselleria de Bienestar Social debe más de 300.000 euros al consistorio en concepto del 60 % de la subvención comprometida con la residencia de la Tercera Edad.
Veintiún trabajadores a jornada completa y otros 6 a tiempo parcial, más los que realizan sustituciones estivales han visto cómo el ayuntamiento únicamente les ha podido pagar la Seguridad Social. El resto del dinero que quedaba se ha destinado a pagar a los proveedores ya que, sino, estos dejarían de suministrar la alimentación y resto de productos necesarios para la atención de los ancianos.
El Ayuntamiento de Forcall debería haber cobrado los 300.000 euros el pasado mes de abril y, de hecho, tendría que estar a punto de cobrar el 40 % restante, alrededor de 200.000 euros. No obstante el dinero no ha llegado. «Primero dijeron que a mediados de septiembre, una vez hubiesen pagado a las residencias que no habían cobrado 2012, pero no ha sido así». Así lo ha explicado el alcalde de Forcall, Santiago Pérez, quien ha manifestado su «cansancio», porque hace más de un lustro que la Generalitat no paga con regularidad y en plazo.
«Esta mañana -por ayer- he vuelto a llamar a la directora general de Bienestar Social, pero no estaba, estaba en un acto. El lunes la volveré a llamar a ver qué pasa».
Pérez ha relatado que la falta de regularidad en los pagos del Consell obligó al ayuntamiento a suscribir una línea de crédito de 300.000 euros, con los consiguientes intereses.
«No obstante la línea de crédito la tenemos agotada, únicamente nos quedan en el banco 7.000 euros, que no nos dan para casi nada». El primer edil de Forcall ha lamentado que la administración autonómica «no consiga regularizar esta situación, porque cuando no es una residencia es otra y no es la primera vez que sufrimos estos retrasos».
De no solucionarse la situación de manera inmediata el Ayuntamiento de Forcall no descarta nuevas medidas de presión. Y es que no sería la primera vez que vecinos del municipio se movilizan para protestar ante el Consell. La residencia de Forcall atiende a 40 ancianos. Es, como dicen los vecinos, «la primera empresa del pueblo», ya que en el centro trabajan miembros de muchas familias de la localidad.
Recortes en la comarca
La falta de pago no solo afecta a Forcall. Los servicios sociales de la Mancomunitat Els Ports están pendientes del pago del dinero de 2012 y 2013. Y además menos dinero que en años anteriores, porque estos servicios han sufrido un recorte del 40 % respeto a años anteriores. Santiago Pérez, que también ostenta el cargo de presidente comarcal, señala que si no hubiese sido por la asignación de 21.000 euros de la Diputación de Castellón no se hubiese podido mantener la asistencia domiciliaria o los servicios sociales.
Así mismo la mancomunitat también está a la espera de otros 23.000 euros de la Federación Valenciana de Municipios y Provincias. La falta de pago de la Generalitat también condiciona el cumplimiento de las obligaciones contables del ente comarcal.
Dependiente totalmente de las ayudas y subvenciones hasta que no las percibe o no conoce las cantidades de las ayudas no puede presentar estas cuentas. Es por eso que en el pleno del pasado miércoles en Vilafranca se aprobaron todavía las liquidaciones de 2011 y 2012.
