"Tranquila y contenta por declarar delante de un juez y poder dar nuestra versión de los hechos de una denuncia". Así se mostró la alcaldesa de Benicàssim, Susana Marqués, tras prestar declaración ayer ante el juzgado de Instrucción nº 2 de Castelló a raíz de la denuncia presentada por el concejal del Bloc y miembro de Compromís por la forma en que se disolvió la sociedad mixta Desarrollo Turístico de Benicàssim (DTB). Tras prestar declaración en la Casa de la Justicia durante la mañana de ayer, la alcaldesa volvió a transmitir tranquilidad "porque no tengo nada que esconder", tal y como declaró a través de un comunicado.
Junto a Marqués, la edil responsable del área de Turismo, Helena Llobell, también se personó ayer ante el juez ya que los nueve miembros del equipo de gobierno popular están llamados a declarar en calidad de imputados por un presunto delito de prevaricación administrativa.
La primer edil señaló que su relato ante el juez consistió en explicar los motivos que llevaron al PP a extinguir la sociedad mixta de la que el ayuntamiento poseía el 60 % y la Asociación de Empresarios Turísticos de Benicàssim (AETB) el 40 % restante, la cual acumulaba una deuda de 130.000 euros. Esa deuda, relató Marqués, "se generó bajo el gobierno que formaban Bloc-EU-PSPV, gobierno del que Domingo Ferrando era teniente de alcalde y resulta particularmente extraño que cuando Ferrando formaba parte del equipo de gobierno permaneciese callado y no tomara acciones para evitar esa gran deuda".
En declaraciones realizadas a este diario, la alcaldesa aseguró que la denuncia "a nuestro entender, no tiene ningún fundamento para estar en la vía de lo penal" y uno de los objetivos que, según la alcaldesa, llevó a Ferrando a denunciar ese acuerdo que se tomó en sesión plenaria con los votos a favor únicamente del PP "es para que yo llegue a las puertas de las elecciones con una imputación, sea falsa o verdadera y así, por las directrices de partido se supone que si es una imputación que dañara la imagen del partido y la mía no podría presentarme a las elecciones. Es algo que no ha conseguido en las urnas y lo intenta conseguir en los juzgados".
Un puesto en el gobierno
En el comunicado emitido ayer la edil también acusó a Ferrando de interponer la denuncia como "venganza" por no conseguir del PP un puesto en el equipo de gobierno. "Resulta curioso que tras las elecciones, a los pocos días de ser alcaldesa, el propio concejal del Bloc, Domingo Ferrando, pidiera insistentemente un puesto en el equipo de gobierno, petición que no aceptamos por respeto a nuestros votantes. A partir de ahí el Bloc optó por esta reiterada forma de poner denuncias en los juzgados como pataleta", sentenció la edil quien aseguró que, por parte del equipo de gobierno, se va a seguir trabajando "por y para Benicàssim y este tipo de actitudes impropias en democracia no variarán la hoja de ruta marcada por el Partido Popular de Benicàssim que siempre ha tomado decisiones de manera honesta, con el único fin de preservar el interés público, que es el de nuestros ciudadanos".
