«Chavista», «marciano», «demagogo», «populista» y «friki» fueron algunos de los calificativos que ayer dedicó el equipo de gobierno de Castelló a los grupos de la oposición en diversas intervenciones en el pleno municipal. La batalla dialéctica entre el PP y los partidos de izquierda se acrecienta a medida que se acercan las elecciones municipales. En este ambiente los populares han elevado su perfil crítico con la oposición ante el temor a perder la alcaldía en 2015, tal como apuntaron los resultados de los comicios europeos del 25M, que en el caso de repetirse en un año posibilitarían un gobierno de izquierdas en el ayuntamiento por primera vez en 24 años. Los populares tildaron a la portavoz socialista, Amparo Marco, de «bolivariana» y a la regidora de Esquerra Unida, Carmen Carreras, la acusaron de buscar el voto «friki y radical».

El alcalde, Alfonso Bataller, ya nombró hace un mes como nuevo portavoz a Juan José Pérez Macián en lugar de Miguel Ángel Mulet con el afán de reforzar la proyección del ejecutivo local con vistas a la cita electoral de 2015. Desde entonces, Pérez Macián se afana en vender una imagen de «radicalidad» del tripartito de izquierdas y de restar credibilidad a sus propuestas, tal como se pudo constatar en la sesión plenaria de ayer.

A la portavoz socialista, Amparo Marco, la acusó de defender la expropiación de viviendas al estilo de «Hugo Chávez». «Si quiere ser la marca blanca de Podemos, la gente preferirá la original», espetó a la edil, que había propuesto la creación de alquileres solidarios en Castelló. El portavoz popular también se burló de la radiografía social que expuso Marco - extraída de informes de Cáritas, entre otros- y resaltó: «los datos los ha encontrado en un charco». «Lamento sus dos intervenciones populistas, son de un mundo irreal y se ha subido a la nave espacial de Esquerra Unida», remarcó Pérez Macián, quien volvió a culpar al anterior Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero de la crisis económica y de los desahucios. «Las ejecuciones hipotecarias tienen un número, una barra y un año y todos los expedientes llevan la barra de ZP; dejaré de hablar de la herencia de ZP cuando deje de estar presente», remató el concejal popular.

El regidor de Cultura, Vicent Sales, mantuvo un pulso con EU por no querer consensuar una moción sobre el planetario e indicó a Carreras que su objetivo es buscar en el granero de voto «radical» , refiriéndose también de modo crítico a la reunión que mantuvo su asesor con integrantes del Casal Popular expulsados del anterior pleno. «A lo mejor encontramos a Carreras pidiendo el voto de Carmen de Mairena», sostuvo Sales. EU pretendía una reactivación del planetario y el PP planteó seguir con las actuales campañas de promoción.

«Todo lo que hacen ustedes está bien, nuestra oposición es histérica y sin sentido», contestó con ironía el edil socialista, Pep Lluís Grau, mientras su correligionaria, Patricia Puerta, censuró en el turno de ruegos la intervención del alcalde en el estado de la ciudad en la que se vanaglorió de ser «patrón de yate».

Peris apunta a Fabra y Gimeno

El edil socialista, Javier Peris, reclamó sin éxito una nueva ordenanza de vados ante la profusión, dijo, de párkings que obvian pagar este impuesto y que disponen de placas falsas. Peris aseguró incluso que los exalcaldes, José Luis Gimeno y Alberto Fabra y la Cámara de Comercio eluden también su pago.