El diputado autonómico socialista Miguel Ángel Guillén defendió ayer en las Corts Valencianes la continuidad de los servicios ferroviarios en el tramo Valencia-Teruel de los que se aprovechan los habitantes de la comarca del Alto Palancia. Además, alertó del impacto social que tendría la supresión del mismo. Esta reivindicación se produce después de que el Ministerio de Fomento, a principios de 2013, hiciera pública una lista de líneas de tren de media distancia que tenía previsto suprimir por razones económicas. Entre ellas se encuentra la de Valencia-Teruel, con un servicio diario y parada en las estaciones de Segorbe y Barracas cuya explotación arrojaba un déficit de 1.486.245 euros.
El también concejal socialista de Segorbe apuntó que «la rentabilidad social debe primar sobre los criterios meramente economicistas». Además, añadió que «la supresión del servicio, además de disminuir las posibilidades de comunicación con la costa y el interior, perjudica a los sectores más débiles de la comarca palantina, personas mayores y estudiantes».
Retirada de servicios
El diputado socialista también lamentó que lejos de las pretensiones del alcalde de Segorbe, Rafael Calvo, que ha estado reivindicando dos paradas de pasajeros y mercancías en Segorbe del corredor Cantábrico, «la realidad es que hoy día tenemos que reivindicar que no nos quiten más servicios de los que ya ha suprimido el Gobierno de Rajoy». En ese sentido, Guillén también quiso recordar que la consellera de Infraestructuras, Isabel Bonig, y el alcalde de Segorbe, Rafael Calvo, se reunieron en febrero en Madrid con el director general de Ferrocarriles, Miguel Pozo de Castro, para solicitar la mejora de la línea Sagunto-Teruel-Zaragoza, y reclamar las infraestructuras del eje cantábrico-levantino. En su comparecencia, Guillén aprovechó para señalar que la reunión «quedó en agua de borrajas, porque no se ha producido desde entonces ninguna mejora en la línea del ferrocarril».
