El Real Decreto sobre energía renovable aprobado por el Gobierno el pasado 6 de junio conllevará un recorte de 231 millones de euros anuales y afectará a 18.000 empleos en el sector en la Comunitat Valenciana (alrededor de 200 en Castelló), especialmente en las plantas eólicas, fotovoltaicas y de cogeneración, lo cual afecta especialmente al sector azulejero de Castelló.

Así se pone de manifiesto en un informe sobre el impacto de esta normativa gubernamental en la Comunitat Valenciana, elaborado por la Asociación Valenciana de Empresas del Sector de la Energía (Avaesen) y presentado ayer a empresas y administraciones públicas.

El Real Decreto fija unos recortes para el conjunto de España de 1.700 millones de euros, de los que 231 serán en plantas instaladas en la Comunitat Valenciana.

La nueva legislación anula el sistema de primas que funcionaba desde 2004 por otro de compensación que podrá ser «modificado de forma arbitraria cada 3 o 6 años», según explicó el presidente de Avaesen, Marcos Lacruz.

El nuevo marco regulatorio, afirmó Lacruz, «cambia el escenario anterior de generación bonificada por una retribución a la inversión en la que la eficiencia no es lo importante».

Los recortes alcanzan al 40 por ciento en el caso de la energía eólica y la solar foltovoltaica, y el 22% en el caso de la cogeneración, según el informe. Avaesen ya estudia dos recursos ante el Tribunal Supremo y el Tribunal Europeo.