El Centro de Rehabilitación e Integración Social de enfermos mentales, CRIS, de Segorbe, abrirá sus puertas a finales de abril o principios de mayo. Así lo dio a conocer ayer la concejala de Bienestar Social, Mª Carmen Climent, quien informó de que la pasada semana la Conselleria de Bienestar social aprobó una subvención para el mantenimiento del centro.

El centro lleva proyectado 5 años y, según argumentó en su día el equipo de gobierno, no se ha puesto en marcha desde entonces porque no contaba «con usuarios suficientes». Varios años después, la Conselleria de Bienestar Social ha concedido una subvención para el mantenimiento de este centro que llevará el nombre de Almagrán y estará ubicado en los bajos del edificio construido en el antiguo matadero.

Según la concejala, se trata de un proyecto que el ayuntamiento «está gestando desde 2010 y en el que se ha invertido un gran esfuerzo tanto técnico como económico». Climent apuntó que el CRIS será «de gestión municipal, pero de ámbito comarcal».

El centro tiene capacidad para cincuenta usuarios, aunque, comentó la edil, «inicialmente abrirá con veinte procedentes de toda la comarca, hasta ir completando el aforo máximo». Climent explicó que además, «no se les exigirá, conforme a la actual normativa, el pago de tasa alguna por la prestación del servicio».

La apertura está prevista para la segunda quincena de abril o la primera de mayo. Para ello se va a firmar un convenio con la diputació para llevar a cabo el equipamiento. En este sentido, informó la concejala, «el pasado pleno se aprobó una partida presupuestaria de 29.500 euros para la compra del mobiliario que luego se justificará ante la entidad provincial».

El personal, de conformidad con la normativa, será exclusivamente técnico y estará formado por tres psicólogos, dos educadores, un trabajador social y un terapeuta ocupacional o técnico de integración social. Climent resaltó que los objetivos del CRIS son «la rehabilitación y la integración social de personas con enfermedad mental, a través de abordar la problemática, tanto con el propio enfermo como con su familia y rentabilizar al máximo los recursos de los que dispone el municipio». Los usuarios recibirán tratamiento ambulatorio y podrán participar tanto en talleres como ser beneficiarios de terapias individualizadas.