Han sigo ocho años de lucha, y también de desgaste. La plataforma de afectados por el incendio de l'Alcalatén empezó su batalla judicial con alrededor de 400 personas pero, poco a poco y debido a la lentitud en señalar el juicio, han ido causando baja. En total, unos 340 damnificados han decidido apartarse de la causa judicial y han aceptado las indemnizaciones individuales que les ha ofrecido Iberdrola.
Así las cosas, solamente 60 han llegado a la fase final de esta historia interminable y han logrado que se condene la grave imprudencia que arrasó con pastos, ganados y maquinaria agrícola de los propietarios afectados. El portavoz de la plataforma, Pedro Gozalbo, recordaba ayer que la sentencia condenatoria solo pone fin a la vía penal y que ahora les toca pelear por las indemnizaciones. «Queremos que nos compensen las grandes pérdidas que supuso el incendio para nosotros», aseguró. La plataforma pide cuatro millones de euros.
A ello se suma el incalculable daño medio ambiental. Los portavoces de la asociación explicaron que los terrenos de almendros o de olivos necesitan aproximadamente entre 30 y 35 años para recuperarse. A este respecto, técnicos ambientales y científicos son incluso más precavidos y apuntan a un proceso de recuperación de hasta 60 años.
