Tras perder contra el Acero en el Fornás, el Castellón de Ramón Calderé perdía el liderato y veía como el Atlético Levante se le escapaba a dos puntos. Era finales de febrero y, por delante, un esprint final complicado en el que, además de las últimas rondas de la Copa RFEF, los albinegros afrontaban duelos exigentes contra rivales de la zona alta como Ontinyent y Novelda. Diez jornadas más tarde, los orelluts son líderes y aventajan en cinco puntos al filial granota. Los números del Castellón, en los dos últimos meses de competición, son impecables. Los de la Plana suman siete victorias y tres empates, 24 puntos de 30 posibles en este tramo, que les han permitido asegurarse la presencia en el play-off .
Lo cierto es que, después de la derrota en el puerto de Sagunto, el conjunto castellonense aún atravesó unas semanas de duda. Tras la fácil victoria por 3-0 contra el Requena, el equipo mostró síntomas de asfixia, coincidiendo con la eliminatoria copera frente al Tropezón, con dos empates consecutivos. Primero fue en casa contra el Torrevieja (0-0) y, a la semana siguiente, no pasó de la igualada en Paterna (2-2). Pero, con el cambio de sistema ideado por Calderé, que recuperó un dibujo táctico con un solo delantero y Rubén Suárez como mediapunta con libertad de movimientos, los albinegros han acumulado una trayectoria inmaculada en este último mes de competición.
Seis triunfos, cinco de ellos consecutivos, y un empate han permitido al Castellón recuperar el liderato, además dando muestra de solvencia y seguridad defensiva. Jove Español, Crevillente, La Nucía, Alzira, Cullera y Atlético Saguntino han sido las víctimas de un equipo que ha recuperado las constantes que le permitieron sumar también siete victorias consecutivas a finales del año pasado. A ello hay que sumar la igualada, a última hora, contra el Novelda en un partido que estaba prácticamente ganado.
Bien en defensa, mejor en ataque
Uno de los principales problemas que mostró el Castellón, en el arranque de 2015, fue su falta de acierto cara a puerta. En 8 partidos, desde enero hasta principios de marzo, los albinegros sólo fueron capaces de marcar 6 goles. Un lastre a la hora de sumar puntos que se ha solventado en los últimos dos meses. Los 22 tantos marcados en los últimos 10 partidos atestiguan la mejoría ofensiva que el equipo ha experimentado en este tramo liguero. Con la aportación de un Rubén Suárez en racha, autor de ocho tantos en nueve partidos (hasta su lesión contra el Cullera), el Castellón se ha convertido en el conjunto más goleador, en estos últimos meses, y el segundo de la categoría con 56 tantos, sólo tres menos que el Orihuela.
Además, ha fortalecido su línea defensiva. Sólo Paterna, en dos ocasiones, Jove Español y Novelda han perforado la meta de Álvaro Campos en este esprint final. Aparte, en los últimos cinco partidos, nadie ha podido anotarle un tanto a los orelluts. Unas cifras que han permitido que el Castellón se haya convertido en el conjunto menos goleado de la categoría, con sólo 25 goles en contra. Unas cifras que han ayudado a recuperar el liderato a los de la Plana y que les permiten estar a un paso de certificar el primer puesto del grupo VI de Tercera.
