Las negociaciones entre la patronal Ascer y los sindicatos (CCOO y UGT) siguen sin avanzar un ápice con el convenio colectivo del sector azulejero. Ahora está en vigor de manera prorrogada el anterior marco laboral. En 2017 desaparecería este convenio y se aplicaría el Estatuto del Trabajador si no se llega a un acuerdo. Ascer mantiene su intención de introducir nuevos ajustes en las condiciones laborales y para ello esgrime la situación de incertidumbre de los mercados internacionales. Plantea un aumento salarial anual del 0,3%, congelar la antigüedad y flexibilizar la jornada laboral. Los sindicatos estiman inaceptable esta propuesta y amenazan con próximas movilizaciones. A su juicio, el planteamiento de la patronal supone vaciar de contenido el convenio. Quieren que se conserven al menos las condiciones que se pactaron en el último convenio laboral. j.m. castelló