¿Cómo se presentan estas fiestas de Sant Pasqual 2015?

Van en la misma línea en la que hemos trabajado en los últimos años, sabiendo respetar la absoluta independencia de la «Junta de Festes». Pese a que han sido momentos de mucha dificultad económica, hemos tenido fiestas muy dignas y participativas llegando a organizar más de 250 actos, cifra que es muy elevada si la comparamos con la de otros municipios. Hoy mismo la ciudad está llena hasta la bandera ya que tenemos el concurso de paellas o la comida de las peñas.

Los actos que se mantienen, ¿son una apuesta segura?

Aunque tratamos de innovar cada año, hay decisiones que han sido exitosas y que, por eso, las mantenemos. Por ejemplo, el «Recinte de la marxa» en el que podemos hacer festivales de bastante envergadura como el «Ves Gita't'» Además, la ubicación de este espacio genera menos problemas con los vecinos, aunque al fin y al cabo son diez días complicados y en los que todos tenemos que ceder y ser comprensivos para disfrutar de las fiestas. La ubicación del concurso de paellas en la avenida La Murà también se demostró en septiembre que tuvo muchísima aceptación.

¿Qué papel ocupan los festejos taurinos?

Los toros son el elemento fundamental y central de la fiesta. Sin el toro, no sería lo mismo. Yo siempre he defendido que soy pro taurino. No obstante, es difícil contentar a todos al cien por cien pero esta ciudad ha demostrado que es sensible con este tema y también adoptamos medidas para proteger, no solo la seguridad de los aficionados, sino también las del propio animal. Este es el caso de la ampliación en doscientos metros del primer encierro ya que el animal entra más directamente al corro y se queda más apaciguado que cuando entraba tan rápido desde el «Barranquet».

Además de en la diversión , ¿de qué otras maneras se reflejan los festejos en la ciudad?

Las fiestas son economía. Muchos comerciantes me comentan que esta semana pueden llegar a facturar más que en los meses de verano de julio y agosto. Además, las fiestas son la muestra de nuestros símbolos y de nuestra identidad como pueblo ya que refleja sentimientos que nos unen a todos. Por último, nos permiten vendernos a nosotros mismos como ciudad de cara a todos los visitantes de otras localidades que estos días se acercan hasta aquí.

¿Será definitiva la denegación de los escenarios a las peñas y asociaciones que no pertenecen a la Comissió de Penyes?

Es una medida que me parece bien y a la que apoyo. Lo más habitual es que los escenarios se pidan para organizar actos festivos de las propias peñas y no culturales. No me parecería bien que se deniegue a cualquier peña o asociación que lleve a cabo una actividad teatral o de cualquier otra vertiente cultural. Además, gracias a la Comissió de Penyes, se pueden organizar el 25 o 30 % de las fiestas.

¿Se plantean solventar ese vacío legal?

La Junta de Festes es un ente autónomo y desde el ayuntamiento nuestra postura ha sido siempre la de garantizar esa autonomía y restringir nuestra intervención en cuestiones como la seguridad o la organización de los actos. Además de respetar esa autonomía y confiar en la Junta de Festes y en la Comissió de Penyes para la organización de los actos, creo que el criterio que han aplicado es coherente. Las peñas de la Comissió de Penyes contribuyen económicamente para que los actos se puedan llevar a cabo y este es un elemento de solidaridad que comparto absolutamente.

¿Cómo afronta las que pueden ser sus últimas fiestas como alcalde?

Las afronto con ilusión y el sentimiento de haber cumplido con los vila-realenses a pesar de la situación económica que nos encontramos al llegar agravada por los empastres que el anterior gobierno del PP nos dejó. Y las afronto también con la ilusión de poder volver a contar con la confianza de los vila-realenses para los próximos cuatro años y poder completar nuestro proyecto y continuar haciendo que Vila-real avance, que para nosotros es lo primero.