Vilafranca, Benassal y Culla celebraron ayer los actos religiosos de Pascua de Pentecostés. En Vilafranca, la «Pàsqua de Llosar» reunió a los vecinos en la procesión en la que no faltaron los guiones y banderas, niños y niñas de comunión, mayorales y mayoralesas, portantes de las peañas, la representación municipal y la Unió Musical de Vilafranca, además de numerosos sacerdotes. Una vez se llegó a la ermita se celebró la misa y se realizó la tradicional invitación a leche y pastas en Els Arcs del Pare Plàcid. Benassal ascendió hasta la ermita de Sant Cristòfol. En lo alto de la montaña, tras la misa se repartieron «les primes». Culla también visitó Sant Cristòfol con la Dansa dels Negrets, el reparto de la prima y la bendición de vehículos.