Los colegios de Castelló celebraron ayer el último día de clase con diferentes actividades lúdicas que fueron del agrado de todos los escolares y padres que acudieron a la clausura del curso escolar. La mayoría de los centros celebraron una pequeña fiesta de despedida y, algunos de ellos, además, también hicieron conciertos, talleres, teatros y actuaciones musicales a cargo de los propios estudiantes. Tampoco faltaron las acciones reivindicativas como la cadena humana que formaron los estudiantes, padres y profesorado del Colegio de Educación Infantil y Primaria (CEIP) Herrero.
En el colegio Juan G. Ripollés la fiesta empezó a las siete de la tarde y se prolongó hasta las nueve de la noche con varios conciertos. Otros empezaron más pronto, como el CEIP Mestre Canós que inició las actividades a las cinco y media de la tarde. Las celebraciones estuvieron marcadas por la incertidumbre en cuando al inicio del próximo curso escolar ante el cambio de Gobierno de la Generalitat Valenciana que se producirá en breve y que nombrará presidente a Ximo Puig.
Con todo, la falta de previsión del Consell no empañó uno de los días más esperados por los escolares y que supone el punto final a nueve meses de estudios y aprendizaje. Es por ello que nadie quiso perderse las actividades que había preparado los respectivos colegios para desear del mejor de los veranos a todos los niños. De momento, también se desconoce la fecha de inició del próximo curso que el Consell de Alberto Fabra marcó para la primera semana de septiembre y Puig ya ha anunciado su intención de retrasarlo.
