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El valor de la honradez

El valor de la honradez

La oficina de objetos perdidos que la Policía Local de la Vall d'Uixó abrió el pasado mes de diciembre no solo está siendo de utilidad para que aquellos que han perdido alguna cosa puedan recuperarla, sino que además está sirviendo para demostrar la «honradez» de los vecinos de la ciudad. Allí han acudido para devolver cheques, carteras con dinero, además de joyas, móviles, bolsos, y muchas llaves y gafas de sol.

En los últimos días se han producido dos ejemplos significativos de que no todo el mundo es amigo de lo ajeno. Así según explicaba el responsable de la oficina, Juan Rius, un vecino «llevó a la Policía Local dos cheques de dos entidades bancarias diferentes por un valor superior a los 8.000 euros, cheques que tenían destinatario y que procedían de una empresa, por lo que una vez nos los llevaron, contactamos con las entidades bancarias que procedieron a anularlos y a comunicar lo sucedido al pagador de los mismos». El agente explicó que estos cheques se enviaron por correo «y no se sabe cómo, todo apunta a que aparecieron tirados por la calle».

Otro caso similar es el de las carteras que aparecen, incluso, con el dinero que tenía el propietario. «Nos las traen completas, como el caso de esta semana que nos han traída una con un billete de 20 euros y diversas monedas, pues la gente lo respeta y demuestra que queda muchísima gente honrada y que recoge dichas carteras con dinero y nos la trae a objetos perdidos para que vuelvan a sus propietarios». Eso sí, «otras vienen vacías, pero son las que se han robado, ahí sí que no queda nada».

No obstante, con la documentación que pueda haber «intentamos localizar a los propietarios y les comunicamos que tenemos su cartera y sus pertenencias».

Mención aparte tiene un vecino de la Vall que se encontró dos billetes de 100 euros en plena calle y los llevó a objetos perdidos en un acto que le honró en su momento y por lo que tuvo una carta de agradecimiento. En este caso al no constar propietario y dada la cantidad económica se levantó un acta en el que el hombre se comprometía a tener en depósito ese dinero durante los tres años que marca la normativa legal, pues en caso de que apareciera y se comprobara la identidad del legítimo propietario se le tendría que retornar, cosa que es muy improbable y muy difícil de demostrar.

Además en la oficina se depositan muchísimos móviles «que a través de compañías y demás intentamos localizar a sus propietarios para devolverlos, con una gran efectividad». Las llaves también se pierden mucho. La Policía, en estos casos, echa mano de su perfil de Facebook para buscar a los dueños.

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