Una de las primeras tareas que ha tenido que asumir con cierta premura el nuevo equipo de gobierno del Ayuntamiento de Nules ha sido la organización de las fiestas, tanto las de San Roque en la playa, como las patronales de San Bartolomé, en el mes de agosto, para las que una de las principales novedades que se plantean incorporar es que el local de fiestas sea «rotatorio», según explicó ayer el alcalde, David García.
Hasta el momento, tanto las orquestas, como las discomóviles y otras actividades como la tasca de fiestas, se concentraban en el local al aire libre existente junto al Camí La Mar, lo que ocasionaba las quejas de los vecinos de la zona, por ruidos y suciedad. Precisamente en respuesta a este malestar -manifestado una vez más a los representantes del nuevo ayuntamiento en la asamblea vecinal organizada en el Grupo Inés Alcázar hace algunos días- el equipo de gobierno está estudiando la posibilidad de que este tipo de actividades «se organicen en distintos puntos de la ciudad», lo que permitirá «tanto acercar la fiesta a diferentes zonas, como hacer que las molestias no se concentren en un único punto».
Según matizó el alcalde, «se trata de compartir las cosas buenas de las fiestas, pero también las menos buenas, como podrían ser las molestias por ruido», de manera que no tengan que ser siempre las mismas zonas y los mismos vecinos los que soporten esa parte negativa de las celebraciones populares.
En relación a las fiestas, David García señaló que la nueva edil del área está trabajando en la confección de un programa, tanto para la playa, como para las patronales, «que respete las cosas que ya funcionaban y que tenían éxito entre la gente, pero que aporte cosas nuevas».
Buscar una reina de las fiestas
En este sentido, destacó que queda «mucho trabajo por hacer», porque el único acto cerrado para las fiestas de agosto era el concierto de Pablo Alborán, por lo que han tenido que ponerse manos a la obra con cierta celeridad para, entre otras cosas, «buscar una reina de las fiestas», dado que no había nada concretado, por poner un ejemplo.
Sobre este tema desde el equipo de gobierno anterior se explicó que entendían «que no se podían comprometer determinadas cuestiones sin saber si se iba a seguir al frente del ayuntamiento, porque cada cual tiene un criterio a la hora de organizar las fiestas», según explicó el anterior alcalde y portavoz del grupo popular en el Ayuntamiento, Mario García.
Respecto del concierto de Pablo Alborán, el portavoz popular defendió, frente a las críticas del nuevo gobierno por el coste para la ciudad, que era «una oportunidad que entendíamos que no debíamos dejar pasar, por la repercusión y el impacto económico que tendrá en nuestra ciudad, dado que se espera que acudan miles de personas de distintos puntos de España, lo que a efectos de promoción local es inestimable y muy positivo».
