Es publicista de formación y ejercía como periodista hasta enero. ¿Cómo se ve todo desde el otro lado?
Se ve muy diferente. La verdad es que por deformación profesional cuando me preguntan pienso en qué quiere el periodista que le responda como político. Creo que es algo que tendré que ir viendo cómo lo arreglo.
Compromís ha sido la gran sorpresa de las elecciones con resultados por encima de C's o Podemos. ¿A qué lo achaca?
Creo que a la propuesta de cambio generalizada y también a una gran labor que hemos hecho desde Borriana. Era un colectivo que estaba permanente pero que no sobresalía y creo que la inclusión de mucha gente joven ha hecho que reviva. Es lo más positivo independientemente de los resultados.
Hablemos del pacto de gobierno. ¿Es tan sólido como para mantenerse cuatro años?
Pensamos que hemos hecho un buen pacto. Hemos hecho un reglamento de pacto que es bastante sólido porque los tres partidos somos importantes, los tres decidimos y el ayuntamiento depende de los tres. Hay una comisión de seguimiento para ver si estamos haciendo las cosas bien.
¿Se van a estar vigilando por el rabillo del ojo?
No se trata de vigilar y en el pacto viene recogido que cualquier cosa que haga uno de los miembros del equipo lo tiene que notificar al resto. Sí que está habiendo un contacto continuo y está funcionando bien durante las primeras semanas.
¿Pero es viable mantenerlo cuatro años?
Eso lo dirá el tiempo, si todos estamos acudiendo a las mismas reuniones, llegará un momento de reparto de trabajo, y entonces nuestras reuniones internas serán más enriquecedoras a la hora de que cada uno explicará cómo ha ido su reunión. Estamos contentos porque ha habido un contacto continuo explicando lo que vamos a hacer y creo que va a ser la tónica de los próximo cuatro años.
¿Habrá fricciones en el ejercicio de poder?
Realmente en esta semana y media, en cualquier decisión importante, la alcaldesa ha estado en contacto con Podemos y con nosotros y en las reuniones importantes estamos los tres. Sí que se está cogiendo la idea de equipo y no de persona.
Compromís hizo valer su crecimiento ante la pérdida de votos del PSPV para pedir la alcaldía. ¿Han perdido una batalla?
No, no creo que la hayamos perdido. Se trataba de negociar. Estoy convencido de que hemos hecho un gran pacto y nuestra gente quería que estuviéramos gestionando en el ayuntamiento y eso es lo más positivo que se puede sacar de estas elecciones. Compromís hacía 8 años que no estaba en el ayuntamiento y vuelve gobernando y eso es lo más importante.
¿Qué oposición esperan?
Espero tener una oposición fuerte y que van a estar controlando la gestión. En mi discurso de investidura dije que les daba la mano a los partidos de la oposición para dialogar e insistí en que tenía que haber un control de gobierno porque esa faena en necesaria. La corporación está formada por 21 concejales, nosotros tuvimos 2.190 votos y ellos (el PP) tuvieron más de 4.700 y también se les ha de escuchar.
¿Esperan juego sucio?
No, confío en la gente. Los conozco de antes como periodista y espero la crítica constructiva. Será ver realmente si estamos haciendo las cosas como toca o no y ellos, además, son los más indicados porque hace un mes, estaban ahí.
La portavoz de Cibur se quejó de que en estas elecciones entraba gente sin preparación. ¿Qué opina?
En el consistorio siempre ha entrado gente sin preparación y el tiempo hace que esa gente aprenda. Nadie nace enseñado y ahora es momento que nos dejen trabajar. Creo que es importante que entre aire fresco. Es posible que se equivoquen, pero todo lo harán para bien, como todos los que han estado.
¿En qué va a notar el vecino que el consistorio está regido por un gobierno de progreso?
Creo que los vecinos lo van a notar en ellos mismos, que van a participar mucho más si ellos quieren, en decisiones de gobierno. Se le va a dar más importancia a la gente y creo que hablo por todos en el gobierno, que vamos a estar más en contacto con la gente.
¿Qué primeras medidas destacaría?
Ha sido un gesto más que otra cosa: la eliminación del parking reservado para concejales de la calle Mayor. La gente no tiene un sitio reservado cuando va a trabajar, entonces, ¿por qué nosotros sí? Era una señal de igualdad. A partir de ahí, las propuestas de retirar la escolta, el coche oficial?. Esas medidas son las primeras que se han tomado y después destacaría las de bajarnos los sueldos el equipo de gobierno.
¿Cree que estaban sobredimensionados los anteriores?
No lo puedo decir. Pensábamos que teníamos que tener unos más igualitarios a los que la gente está cobrando en el mundo laboral. Fue una decisión unánime.
¿Con qué decisiones cree que saltarán chispas con sus socios de gobierno?
No creo que haya al final tantas diferencias. Creo que serán cosas muy puntuales. Quizá en un futuro temas como Sant Gregori... pero tampoco creo que vaya a haber una confrontación, más bien una 'entente cordiale' de cualquier tema. A partir de ahí todo se ha de hablar, tres opiniones valen más que una.
¿Ya han levantado alfombras y abierto cajones?
Estamos empezando a saber qué queda en cada partida. Tenemos la suerte de que el Síndic de Comptes va a hacer una auditoría externa. La vamos a aprovechar para saber cómo está el ayuntamiento. Aún así, ya le hemos pedido a la interventora, que nos pase las cuentas.
¿Qué proyectos del PP se van a mantener?
Sant Gregori va a llevarse adelante. Después de tantos años de tramitación a todos nos gustaría. De aquí a dos años caduca la reparcelación. Vamos a intentar buscar soluciones en estos años antes de que se dé una situación más caótica para el ayuntamiento.
¿Y qué dejarán de lado?
En tema urbanístico, sobre todo, había muchos proyectos hechos como Santa Bárbara o Pedrera Port que realmente se han de estudiar y preguntar a la gente. Hay muchos proyectos sobre los que hay que decidir si vamos a hacerlos o no.
