Tiene contrato con el Castellón, pero su presencia en la próxima temporada no es segura. El polivalente Borja Gracia medita salir cedido en busca de un mayor número de minutos. El joven valenciano apenas tuvo protagonismo desde la llegada de Ramón María Calderé, y no quiere pasar otra temporada en el banquillo.

A sus 21 años, el joven de Oliva fue uno de los primeros en fichar por el Castellón de la pasada campaña. Formado en las categorías inferiores del Valencia, recaló en Castalia tras un paso por el Atlético Saguntino. Comenzó la temporada actuando en su posición natural, la de pivote defensivo, de la mano de Joan Esteva. Pero poco a poco fue perdiendo peso en el equipo, máxime tras la llegada de Calderé al banquillo. Su participación se redujo prácticamente a la Copa Federación, como defensa central o lateral derecho. Su entrega y profesionalidad despertaron el cariño del aficionado. En esa posición de lateral derecho jugó el partido de promoción contra el Haro en Castalia. En total, disputó en Liga 16 partidos, 7 como titular y 9 como suplente, para sumar 861 minutos. Vio 6 amarillas.

Borja Gracia medita ahora si pelear por un puesto en el Castellón, como hizo la pasada campaña, o buscar una cesión que le asegure más minutos de juego.

Alberto Catalán y Pino, en el aire

Tampoco está clara la situación del portero Alberto Catalán. El ondense fue cedido al Requena cuando llegó Álvaro Campos la pasada temporada. Terminó el curso en el Onda y vuelve al Castellón. La salida de Alex Ruiz, el guardameta suplente, le deja sitio en el primer equipo, pero el club albinegro no descarta una salida. Asimismo, la renovación de Víctor Pino sigue sin concretarse.