Vila-real inició ayer su Aplec d'Estiu que incluye, desde hace tres ejercicios, el primer comedor de verano de la provincia y que este año ofrece también por primera vez, además de la comida, el desayuno a los usuarios, 577 niños y niñas de entre 6 y 16 años. Según señalaron ayer fuentes municipales en un comunicado, alrededor de 200 menores de familias con pocos recursos podrán de esta forma realizar dos comidas completas al día al tener bonificada la totalidad de la matrícula.
La iniciativa, promovida por la Concejalía de Servicios Sociales durante las dos quincenas de julio y la primera de agosto en los colegios Pascual Nácher y Botànic Calduch, cuenta en esta edición con 577 alumnos inscritos, de los que 225 harán uso del comedor escolar y 128 del servicio de desayuno.
En un total de 199 casos, la matrícula estará bonificada al 100 % y, cuando los Servicios Sociales lo consideren, los usuarios podrán repetir los turnos, de manera que 43 menores alargarán la estancia durante dos o las tres quincenas del Aplec, ya que la concejalía ofrece descuentos del 50 % e incluso de la bonificación total en función de cada caso para el servicio de comedor.
El alcalde, José Benlloch, valoró el recurso como una medida «de vital importancia», ya que «no sólo ofrece actividades lúdicas y recreativas para ocupar el tiempo libre de los niños durante el verano, sino que permite la conciliación familiar y, lo que es más importante, garantiza la correcta alimentación de muchos menores en riesgo de exclusión social gracias a las ayudas del ayuntamiento».
No obstante, Benlloch recordó que se trata de una iniciativa «inclusiva», ya que «en el Aplec todos los niños son iguales y nadie sabe quién está becado y quién puede pagar el servicio con sus propios recursos familiares».
Esta es una de las medidas puestas en marcha por el área Servicios Sociales, que se ha marcado como objetivo garantizar una correcta alimentación a todos los menores desde 0 a 18 años y en todas las épocas del año. Para ello, el consistorio ha puesto en marcha otras medidas como la modificación de la ordenanza de becas de comedor para incluir los meses de septiembre y junio, así como las ayudas a las familias que lo necesitan para cubrir la estancia en escuelas infantiles, los vales de productos frescos o la puesta en marcha de escuelas vacacionales en Pascua o Navidad.
