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El ayuntamiento deniega la licencia a una discoteca de la zona Lagasca

El TSJ anuló en junio un primer permiso de funcionamiento por contaminación acústica

El Ayuntamiento de Castelló ha denegado la licencia de funcionamiento solicitada por una conocida discoteca de la calle Lagasca. El Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana había anulado el permiso anterior y el establecimiento tramitó una segunda ante el consistorio, pero los servicios municipales la han rechazado al considerar que no se dan las condiciones tras la resolución judicial y la declaración de Lagasca de Zona Acústicamente Saturada

La discoteca presentó al ayuntamiento el 30 julio la petición de una licencia de funcionamiento con la confianza de que estuviera aprobada para el retorno de vacaciones del mes de septiembre. Pero los servicios municipales tumba esta posibilidad y este espacio continúa de momento sin los requisitos legales básicos para poder abrir.

Esta negativa es consecuencia de un fallo judicial del TSJ del pasado mes de junio que anuló el un primer permiso por una cuestión de contaminación acústica. El tribunal desestimó una primera resolución favorable a la discoteca del contencioso administrativo y se hizo eco de unas mediciones de ruido para constatar un excesivo ruido.

El proceso judicial ha sido impulsado por varias comunidades de vecinos del entorno de la calle Lagasca y se remonta a 2007. El TSJ esgrime que las mediciones de 2007 y 2008 pusieron en evidencia que el ruido generado en las viviendas de situadas junto a la discoteca superaba los 40 decibelios que recomienda la Organización Mundial de la Salud.

Las mediciones proceden de hace siete años pero ahora se da el añadido de que Lagasca es Zona Acústicamente Saturada, y este hecho también ha incidido en la toma de decisión de los técnicos municipales.

La empresa argumenta que la ZAS sólo prohíbe nuevas licencias de apertura pero no de funcionamiento, por lo que esperaba el visto bueno del ayuntamiento. Pero la ZAS y la sentencia han pesado más que los argumentos de la discoteca. Desde el consistorio insisten en que la actual legislación limita la concesión de esta licencia.

Cabe recordar que la ZAS prohíbe la concesión de nuevas licencias de apertura, reduce el horario e intensifica la presencia de la Policía Local en la calle.

El cierre de este establecimiento es resultado de una lucha de años de algunos vecinos de la zona contra el ruido que emana de los locales de Lagasca. Consiguieron que el ayuntamiento realizara mediciones y posteriormente que promoviera la ZAS.

Ahora, este grupo de residentes gana la batalla contra la conocida discoteca de Lagasca.

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