La planta de Combustible Derivado de Residuos (CDR) de Onda puede ser una salida «razonable» para toneladas de basura sobrante después del reciclaje. Así lo ven en Reciplasa, la empresa pública que gestiona los residuos del área central de la provincia. Quieren retomar el proyecto, pero todo dependerá de si encuentran salida para el producto.
La instalación fue proyectada en 2012. De hecho, el expresidente de la Generalitat Alberto Fabra colocó la primera piedra de la planta cuya construcción quedó bloqueada. La mayor parte del combustible generado a partir de residuos iba a destinarse a una gran cementera, con la que se había llegado a un acuerdo. El presidente de la Diputación de Castelló, Javier Moliner, dijo el día de la presentación que la venta estaba garantizada para los diez años siguientes.
Sin embargo, el proyecto decayó cuando la empresa dio marcha atrás y no se pudo encontrar una salida alternativa para este producto. Ahora, según indican desde Reciplasa, hay otro grupo empresariales, del sector cerámico, interesado en comprar el combustible.
Esto podría ayuda a reimpulsar la instalación. Sin embargo, desde la entidad de residuos quieren estudiar el proyecto con cautela. Según explican las mismas fuentes, no pueden fiar la planta a un único cliente y que suceda lo mismo que con la cementera. La instalación de CDR supondría una inversión cuantiosa -inicialmente estaba presupuestada en 9 millones de euros- que Reciplasa no está dispuesta a asumir si no se tienen todas las garantías de que hay salida para el combustible generado.
Por otra parte, aún faltaría saber si la Conselleria de Medio Ambiente autorizaría retomar el proyecto, ya que todavía está por definir el modelo de gestión de residuos del nuevo Consell.
Vertedero de Tales
Reciplasa tiene previsto celebrar hoy una reunión del consejo de administración en la que se abordará, entre otros asuntos, la reapertura del vertedero de Tales. Tal y como adelantó este diario, la empresa pública recibió el pasado mes de agosto la autorización del ayuntamiento para reabrir y ampliar la instalación. Está previsto depositar allí los residuos que en la actualidad se trasladan al municipio valenciano de Algimia d'Alfara. Reciplasa prevé ahorrar así dos millones de euros al año, el coste actual del traslado de 70.000 toneladas de basuras a la provincia vecina.
De forma paralela, la entidad estudia también la posibilidad de ampliar la planta de tratamiento de residuos de Onda, donde van a parar las basuras de 44 localidades de las comarcas de la Plana Alta, l'Alcalatén y el Alto Mijares, con una población conjunta de 365.000 habitantes. En cualquier caso, aunque se ampliara esta planta, sería necesario construir la instalación de Tales, según señalaron en su día desde Reciplasa. El consejo de administración de la entidad no ha activado de momento el procedimiento para iniciar los trabajos.
