Entre 1.400 y 1.500 personas se dieron cita anoche en la plaza Mayor de Vila-real para celebrar la 28ª edición de la macro cena y fiesta de disfraces que la Junta de Festes de la localidad y la Comissió de Penyes organizan cada año para los peñistas. La música, la ironía y el buen humor fueron los protagonistas de la noche, en la las calles del centro de la ciudad mostraron una estampa variopinta y divertida con indumentarias de indios, piratas, grupos de música o personalidades de la farándula, entre muchos otros.
Tras la cena, llegó el turno de la música con la «Festa Diez FM' con la que, incluso, se llegaron a congregar más peñistas también de fuera del circuito oficial de peñas y agrupaciones. Asimismo, orquestas y discomóviles llenaron de ambiente las principales calles como Benicarló, Zumalacárregui, Pietat, Bisbe Rocamora, l'Ecce Homo o Mare de Déu dels Desamparats. También estuvo muy concurrida la feria de artesanía.
Otro de los eventos más multitudinarios de las fiestas en honor a la Mare de Déu de Gràcia fue el tradicional «tombet de bou» que se celebró el jueves en el recinto de la marcha y que reunió a más de 3.000 peñistas. Tras el suculento plato, actuó la orquesta Montesol aunque, debido a la lluvia, tuvo que interrumpir su actuación aunque, finalmente, pudieron continuar también a petición de los propios asistentes. Tras la orquesta, la fiesta continuó con una discomóvil.
Respecto a los festejos taurinos, la jornada de ayer correspondió a la exhibición de vacas en la zona de cadafales a cargo de las ganaderías Juan Faet y La Espuela. Los toros encaran hoy la última jornada con el encierro, «bou per la vila» y toro embolado.
En cuanto a otros actos, hoy a las 12.00 horas tendrá lugar en el salón de plenos del ayuntamiento la recepción oficial a las reinas de fiestas de la ciudad, un acto que reúne mujeres de todas las edades que en algún momento de sus vidas vivieron un año especial al ser las máximas representantes festivas de la ciudad. Por otras parte, está previsto que unas 500 personas se den cita en la paella monumental que organiza la penya Picú. Además, esta noche se celebra el «VII Sopar de germanor per a veïns i veïnes» que, por primera vez, tendrá lugar en la avenida La Murà por motivos de afluencia. Y es que, según fuentes de la organización, el encuentro de asociaciones vecinales prevé reunir a más de 2.000 personas. Es por ello que la plaza Mayor, donde se había celebrado hasta ahora, quede pequeña para acoger el multitudinario evento.
Con los actos de hoy, Vila-real pone casi el punto y final a diez intensos días de fiestas patronales en los que se han programado más de doscientas actividades para públicos de todas las edades.
