«Cada uno trae sus intenciones a la Madre. Yo vengo con una petición y acción de gracias al mismo tiempo al Señor porque nos concede reabrir el Seminario Menor de Segorbe con una docena de muchachos que han sentido la llamada incipiente al sacerdocio». De esta manera, el obispo de la Diócesis de Segorbe-Castelló, Casimiro López Llorente, introducía en el centro de la fiesta de la patrona diocesana, la Virgen de la Cueva Santa, una de las grandes peticiones de este curso.

Casimiro López Llorente se plantea el objetivo de reabrir el Seminario Menor desde hace cuatro años ya que, el trabajo de los últimos tres años, ha permitido que este curso una docena de jóvenes comiencen esta experiencia. La modalidad de participación es en régimen interno o externo. En el primero los jóvenes viven en el seminario de lunes a viernes. En el segundo, pasan las tardes en el centro de formación realizando actividades de deporte y estudio. Además, hay actividades formativas propias a la vocación sacerdotal semanalmente, y tiempos de oración.

Por otro lado, en la celebración de la Cueva Santa, el obispo resaltó durante la homilía la triple actitud de la Virgen «de escuchar, decidir y actuar». Vinculado con el objetivo pastoral de curso, Llorente animó a «escuchar con atención la Palabra de Dios para suscitar el encuentro con quien nos habla», y explicó que también se manifiesta en los acontecimientos de la vida: «Veamos lo que el Señor te pide en nuestra Iglesia y parroquias. Y creo que es esto, recuperar la alegría de creer».