El anterior presidente de la Autoridad Portuaria de Castelló, Juan José Monzonís, contó con uno de los salarios públicos más elevados de la provincia con 83.232 euros brutos anuales, según subraya el portal de la transparencia del Ministerio de Fomento. El nuevo responsable del puerto, Francisco Toledo, negó ayer que vaya a cobrar la misma cantidad que Monzonís y aseguró que dispondrá de unas retribuciones inferiores al prescindir de un complemento salarial que percibía Monzonís por sus años al frente del puerto.

Tras tomar posesión como presidente de PortCastelló, Toledo afirmó que los datos oficiales del ministerio se refieren a los emolumentos de Monzonís e insistió en que su salario será más bajo, aunque afirmó desconocer cuánto cobrará. No obstante, el ex rector de la UJI sostuvo que en la Universitat «ganaría más».

De esta manera, salió al paso de la críticas que efectuó Castelló en Moviment el día anterior, en las que cuestionó que el presidente del puerto disponga de un sueldo superior al del presidente del gobierno, Mariano Rajoy. CS en Moviment también censuró que los integrantes del consejo de administración procedentes de otras administraciones cobren dietas por asistencia a las reuniones.

Discurso reivindicativo

Toledo realizó un primer discurso con marcado tono reivindicativo, en el que volvió a exigir celeridad con los accesos terrestres pendientes por tren y carretera, además de más medios para la aduana y el punto de inspección fronterizo. Ante el presidente de Puertos del Estado, José Llorca, la consellera de Obras Públicas, María José Salvador, la alcaldesa, Amparo Marco, y 200 representantes de la sociedad civil de Castelló, valoró la gestión de Monzonís y el ascenso en los últimos 20 años del puerto del puesto 15 al «top 10», y destacó para ello el proyecto de ampliación y la apuesta por la diversificación de sus predecesores.

Zona logística

Su objetivo, destacó, pasa por convertir PortCastelló en un polo logístico y propiciar el desembarco de nuevas líneas regulares, especialmente con conexiones en el Próximo Oriente. Apostó por reforzar el área comercial de la Autoridad Portuaria y anunció «la rebaja de tasas a medida que sea asumible y con una mejora continua de la calidad de los servicios prestados que hay que adaptarlos a las necesidades cambiantes de las empresas».

No obstante, reiteró las «desventajas» que mantiene el puerto respecto a otros destinos, especialmente nombró los retrasos en las conexiones viaria y ferroviaria. «No podemos esperar más, no disponer es una losa demasiado pesada», alertó Toledo.

Tal como afirmó la semana pasada, indicó que la propia Autoridad Portuaria iniciará en 2016 el proyecto de conexión ferroviario interno entre las dársenas norte y sur -con puente retráctil incluido-. Asimismo, confió en conseguir la financiación pública necesaria para tirar adelante con los accesos ferroviarios.

El presidente de Puertos del Estado sólo garantizó la licitación del proyecto constructivo en 2016, pero eludió fijar plazos con las obras.

Indefinición con la estación

El estudio informativo del acceso férreo sitúa la estación intermodal en el Serrallo, aunque Toledo eludió decantarse por esta ubicación o por la de Vila-real.