Kiko Ramírez parece tener clara la receta para resucitar al Castellón. La cuestión es saber cómo aplicarla. El técnico albinegro, en su habitual comparecencia ante los medios previas a los encuentros del conjunto orellut, señalaba que «en casa tenemos que conseguir que nos sintamos cómodos y fuertes y que fuera de casa seamos muy competitivos, que peleemos hasta el último minuto».
Una fórmula en la que tendrá que trabajar mucho el entrenador catalán porque, de momento, Castalia parece haberse convertido en terreno minado para su equipo y lejos de su feudo, a pesar del reciente triunfo contra el Torrevieja, los albinegros todavía no son un grupo fiable.
Después de la derrota en casa contra el Orihuela y con el equipo a nueve puntos de la promoción de ascenso y a sólo cuatro del descenso, Ramírez admitía ayer que «el grupo está presionado por los resultados», pero considera que «eso es importante» para poder revertir la situación. En su opinión, el actual preparador del Castellón considera que «lo estamos haciendo bien, el equipo está entendiendo muy bien las ideas, ahora falta que las plasme bien el domingo», pero añadió que «que asumir las ideas no les haga pensar que sólo con eso se va a ganar».
Además, señaló que «he llegado con la temporada empezada y me he encontrado con un cóctel con gente en un estado X, gente acostumbrada a jugar de una forma y en una posición. Por eso el entrenador tiene muchísimo trabajo».
También se pronunció sobre la derrota de la pasada jornada y afirmó que «hay que ser autocríticos. El domingo al equipo le faltó intensidad por culpa de bloqueo mental. Eso no tiene que volver a pasar». Sobre este aspecto, remató Ramírez señalando que «esta semana los jugadores han entrenado muy bien, hemos trabajado muy bien. El equipo tiene claro qué debe hacer y debe tener intensidad que es lo que reclamo con respecto a la semana pasada. El Castellón va a ser competitivo y si conseguimos eso, conseguiremos más resultados».
Pocos cambios en el once
También admitió Ramírez que quiere realizar «los menos cambios posibles» en el once inicial. «Si estuviésemos en pretemporada, intentaría más cosas. Además, de la primera jornada a la siguiente en la que he estado, ha habido pocos cambios. Mi intención es hacer pocos cambios, los menos posibles y a partir de ahí pedir máxima intensidad y exigencia. El que no juegue, que apriete y el que entrene bien, que sea el que juegue el domingo».
Una de estas novedades puede ser alguien que acabar de regresar como es Dani Pujol. Ramírez reconoció que «si considero que puede jugar de titular, va a jugar». Sobre el extremo catalán, el míster albinegro explicó que «se trata de un chico con ritmo de competición, que viene de jugarlo todo y que reforzará la banda derecha». Además incidió en que «conoce muy bien el vestuario. Se trata de un hombre que nos va a venir muy bien, nos va a dar trabajo y músculo. Es polivalente, puede jugar en distintas posiciones y lo tendremos en cuenta porque ha entrenado toda la semana».
Sobre la posibilidad de que juegue como extremo o como lateral según lo considere oportuno el técnico, Ramírez apuntó que «donde lo haga mejor. Lo voy a probar en los dos sitios y jugará donde se encuentre bien y considere que lo hace bien». El regreso de Pujo también le permite «meter competencia porque faltaba por los retoques que se han tenido que hacer. Faltaba competencia y polivalencia en esa banda».
«Ellos juegan sin presión»
Sobre el rival del mañana, un Elche Ilicitano que se encuentra en la tercera posición del grupo, Ramírez explicó que «ellos están imbatidos en casa. Son un equipo filial y juegan sin presión. Vienen de ganar un partido y de ser campeones territoriales de la Copa RFEF. Es un equipo joven, con jugadores que tienen ganas de subir al primer equipo y van a jugar sin presión». Por eso, será «un partido duro para nosotros, porque tienen mucha calidad. Hay gente muy rápida en banda con jugadores formados aquí. Además, arriba tienen músculo con un delantero centro muy corpulento que va bien de cabeza».
Abundó Kiko Ramírez en su análisis sobre el rival comentando que «nos enfrentamos a un equipo al que le gusta jugar al fútbol, que intentará llevar la iniciativa, que juega en casa y que no se va a encerrar. Se trata de un equipo que está arriba y difícil lo vamos a tener. Pero somos el Castellón y vamos a intentar conseguir los tres puntos», concluyó el entrenador albinegro.
