El Consejo de Gobierno de la Universitat Jaume I (UJI) de Castelló ha aprobado la propuesta de presupuesto para 2016, que asciende a 98.182.000 euros, 6.654.000 euros más que el año pasado, lo que supone un aumento del 7,27 por ciento respecto al ejercicio económico de 2015, derivado, principalmente, de las inversiones para continuar la construcción de los dos módulos restantes de la primera fase del edificio de Ciencias de la Salud.

Para hacer este presupuesto, la UJI ha previsto unos ingresos en concepto de subvención nominativa de la Generalitat cuantificados en 61.754.860 euros, sólo un 1,1 por ciento más que el año pasado, para hacer frente al aumento de los sueldos de los funcionarios y al abono del 50 por ciento de la paga extraordinaria pendiente de 2012. Actualmente, la universidad está recibiendo una subvención ordinaria similar a la de 2006.

Según ha explicado la UJI, el presupuesto para el ejercicio de 2016 ha sido condicionado por la no aplicación del tercer plan plurianual de financiación (PPF) del sistema universitario público valenciano (SUPV) 2010-2017 y los efectos de la modificación de 30 de diciembre de 2014 del convenio de colaboración entre la Generalitat y las cinco universidades públicas para la financiación de gastos corrientes y de inversión con el aplazamiento de la deuda de la Generalitat a favor de las universidades públicas, firmado el 26 mayo de 2008 y modificado el 2011.

Por último, ha condicionado las cuentas la implantación de los estudios de Ciencias de la Salud y la repercusión de diferentes disposiciones y normativas en el comportamiento de los gastos de personal. Por todo esto, el presupuesto se ha diseñado siguiendo un criterio de «prudencia», ya que, por lo que respecta a la subvención ordinaria y al cumplimiento del convenio de la deuda antigua, es dependiente de una administración pública con «un estado financiero y de liquidez delicado por la infrafinanciación».