La directora general de Cultura y Patrimonio de la Generalitat, Carmen Amoraga, ha sido elegida nueva presidenta del Patronato de la Fundación Blasco de Alagón.El nombramiento y toma de posesión de Amoraga ha tenido lugar en el transcurso de la reunión del Patronato celebrada hoy en la sede de la Fundación, en Morella, y que ha sido presidida por el president de la Generalitat, Ximo Puig, ha informado la institución.

Durante la sesión, además de elegir a la nueva presidenta (Puig mantendrá la presidencia de honor), también se ha aprobado la incorporación como nuevos "patrones" de la Associació d'Empresaris Turístics de Morella i Comarca, el presidente de la Mancomunitat de Els Ports, Santiago Pérez, y del alcalde de Morella, Rhamsés Ripollés, que desde hoy asume la secretaría del Patronat. Al finalizar el patronato, Ximo Puig ha señalado que "era una anomalía" que no estuvieran representadas en el Patronato de una Fundación que es de Morella las entidades representativas de la comarca.

En el pleno se ha aprobado asimismo el nuevo consejo rector de la fundación, que se amplía a 5 miembros: Carmen Amoraga, como directora general de Cultura y Patrimonio; Javier Moliner, como presidente de la Diputación de Castellón; Rhamsés Ripollés, como alcalde de Morella, y los representantes de la Mancomunitat dels Ports y de la Associació d'Empresaris de Morella i Comarca. La Fundación Blasco de Alagón es una entidad sin ánimo de lucro que centra su actividad en la "conservación, estudio y búsqueda, defensa, restauración y rehabilitación del patrimonio artístico, arquitectónico, arqueológico, paisajístico y medioambiental de la Comunitat Valenciana y Aragón".

Entre los objetivos del Patronato de la Fundación Blasco de Alagón se encuentra "impulsar la fundación para que pueda ser un punto de enlace entre los diferentes territorios de la antigua Corona de Aragón para fortalecer la presencia y la voluntad de la Comunitat Valenciana". Sobre la conocida como 'Fábrica Giner', sede del Patronato, Puig ha destacado que la voluntad de la Generalitat es "revitalizarla para que tenga un nuevo impulso tras 25 años de decadencia".

Un sinsentido

El primer edil morellano, Rhamsés Ripollés, señalaba que "hoy hemos asistido a un acto importante para nuestra localidad. Desde Morella se ha exigido en numerosas ocasiones que se solucionara lo que era un sinsentido, que era que la gente de este territorio no estuviera representada en la Fundación Blasco de Alagón". Por ello, hace una "valoración positiva" del encuentro, ya que ahora "existe una voluntad de todos de trabajar desde el diálogo y el acuerdo, pero escuchando al territorio y que éste sea protagonista de los proyectos que se lleven a cabo", indicaba.

Fábrica Giner

Uno de los proyectos importantes que tendrá que acometer la Fundación Blasco de Alagón es la situación de la Fábrica Giner. El nuevo consejo directivo realizará una primera auditoría para analizar la situación de la entidad y estudiará cómo revitalizar este complejo. Rhamsés Ripollés señalaba que "hay que ir paso a paso y hacer las cosas bien. En estos años han habido muchos ejemplos de cómo no se han de hacer las cosas. Ahora hay cosas que están funcionando, pero hay que darle un impulso a todo el complejo, con el protagonismo de la gente del territorio".

Hay que recordar que la Generalitat Valenciana impulsó el complejo de la Fábrica Giner a principios de los años 90. El objetivo era convertir una antigua fábrica textil en una oferta turística complementaria y en espacio deportivo y de ocio como no había otro en Morella. Estos objetivos se consiguieron al principio, con unas instalaciones deportivas de alto nivel, un complejo hotelero, albergue, piscina, escuelas deportivas, lugares de ocio y turismo familiar. Pero poco a poco, se ha ido deteriorando y perdiendo, hasta el punto de cerrarse diversas instalaciones.

Sí que han nacido otras zonas que están abiertas y funcionan, como el complejo multiaventura Saltapins, pero la situación de todo el complejo es preocupante. Por ejemplo, hace tres años, el Ayuntamiento de Morella y los clubes de fútbol de la localidad tuvieron que hacerse cargo del mantenimiento del campo de fútbol, porque la Fundación Blasco de Alagón lo abandonó y se corría el riesgo de que no se pudiera jugar en Morella. Ahora, el objetivo es revitalizar este espacio tan querido por los vecinos y vecinas y que tiene tantas posibilidades.