De nuevo un hecho ajeno a la vida política municipal se convirtió ayer en motivo de enfrentamiento entre el equipo de gobierno y el Partido Popular de la Vall d'Uixó, en esta ocasión en relación con la colocación del Belén del consistorio municipal, o más bien la decisión de no hacerlo, que ha sido criticada por los populares, que llegaron a afirmar que «el tripartito ha desahuciado el Belén del ayuntamiento».
Las razones del equipo de gobierno son breves. Fuentes municipales aseguraron que «en el hall del ayuntamiento este año, desde el día 1 de diciembre, están los ordenadores desde los que se realizan las gestiones para acogerse a las ayudas de Xarxa Llibres, que permitirá a 4.000 alumnos de la ciudad beneficiarse de la gratuidad de los libros de texto».
El Partido Popular entiende que en el trasfondo de la medida existen «intereses particulares», por lo que su portavoz, Alejandro Cano, aseguró ayer que «pedimos al gobierno de la Vall que gobierne para todos». En su argumentación, Cano defendió que «el Belén ha sido un clásico en el hall del ayuntamiento y muchas personas y colegios de la ciudad venían a visitarlo». Además, recordó que no se trata de una decisión puntual ya que en Castelló se amenazaba con realizar lo mismo.
Pero en el PP de la Vall no se limitaron a criticar que no se haya instalado el Belén; también se asegura que «han eliminado todos los símbolos religiosos de la iluminación navideña», aduciendo que «el tripartito ha hecho ostentación de su progresismo y han eliminado todos los símbolos religiosos de unas fiestas en las que conmemoramos el nacimiento de Jesús, uno de los personajes más influyentes de la historia».
