Una veintena de miembros del cuerpo de la Guardia Civil ha formado parte de las jornadas PATIO que durante tres días se han llevado a cabo en diferentes puntos de la provincia de Castelló. Como en cualquier profesión, los agentes tampoco pueden librarse de los cursos de formación y el aprendizaje continuo.

El pasado jueves, y a las 9 horas, los agentes de la Guardia Civil se dieron cita en el polideportivo de La Bosca de Borriana, donde se llevaban a cabo las dos primeras sesiones de entrenamiento tanto en materia de tiro como en intervención gradual. Las actuaciones en caso de detención o de conflicto con algún ciudadano fueron los primeros ejercicios que llevó a cabo el instructor de intervención operativa, Juan López. Era realmente curioso contemplar y escuchar cómo el responsable de las jornadas insistía en que «la fuerza empleada en las intervenciones siempre va en función de la situación y de la agresividad mostrada. Intentad imaginar que vuestro compañero debe ser reducido, incluyendo intentar reproducir los nervios de la situación».

Todavía se notaba el frío de la primera hora de la mañana en el polideportivo, cuando los agentes ya parecían haber entrado en calor tras los primeros ejercicios de refresco de las técnicas de defensa personal. Sin necesidad de un oponente, los agentes reprodujeron desde la posición de defensa inicial hasta las caídas o los movimientos de escapada que deben realizarse. Con la adrenalina subiendo poco a poco llegó la segunda de las prácticas dirigida a los distintos métodos de cacheo dependiendo de las características de cada individuo o de los momentos de tensión de una detención. Los agentes se dividían en grupos de tres para reproducir situaciones en las que una pareja de la benemérita debe detener o inmovilizar a un sospechoso. Algunos no podían evitar soltar alguna risa durante el ejercicio, fruto de la distensión que supone una reproducción de una situación que se da en la calle. Otros, en cambio, sufrieron las ganas de algunos compañeros, y hasta alguno tuvo que solicitar que las técnicas de colocación de grilletes fueran «algo más suaves».

El instructor de las jornadas, Juan López comentó que, «hay gente que hace poco tiempo que ha salido de la academia, como la mayoría de los que hay aquí, pero hay otros agentes más veteranos que también deben refrescar y adaptarse a nuevos protocolos de actuación que con el tiempo han cambiado».

Las jornadas de Plan Anual de Técnicas de Intervención Operativa se realizan de forma semestral en las distintas comandancias del estado. Con la jornada de tiro que ayer se llevaba a cabo en las instalaciones de Montaña Negra, la Guardia Civil da por cerrada una nueva edición de las jornadas PATIO que, cada seis meses, renueva y aporta nuevas formas y técnicas de actuación a los agentes del cuerpo.