A pocos metros de la plaza de toros de Castelló se emplaza el Burladero, un bar que con sólo un año de existencia es un punto de reunión de abonados al coso de Pérez Galdós, vecinos del entorno, aficionados al Club Deportivo Castellón y estudiantes extranjeros de la academia de español Audio Gil. El utillero del equipo de fútbol, Eliseo Ramos, es un asiduo y acude por las tardes a jugar a las cartas.
El Burladero está lleno de referencias relacionadas con la tauromaquia y el albinegrismo. Su carta de bocadillos está plagada de denominaciones vinculadas a la lidia. Ofrece 27 entrepanes con nombres como el castizo, capote, banderillero, picador, mayoral, montera, tendido, estoque o recortador, entre otros. Uno de los bocadillos más demandados es el torero, compuesto por longanizas, huevo, pimientos y tomate. El abanico de bocadillos es contundente y sabroso. Hay de panceta, solomillo, sepia, anillas de calamar, pollo, bacon, morcilla y paté.
También dispone de abundantes tapas, en las que podemos encontrar crujiente de rabo de toro, croquetas de jamón y pollo, patatas al roquefort, huevos rotos, crujiente de bacon, morcilla de burgos, calamares, sepia, chipirones, parrillada de verduras o champiñones a la plancha. El almuerzo completo tiene un precio de 5,90 euros y consta de bebida, bocadillo, aceitunas y cacahuetes más café o carajillo o infusión; mientras con medio bocadillo baja a los 4,90 euros.
El local muestra en una parte fotos, carteles taurinos y la cabeza de un astado. En fiestas acogerá un programa radiofónico sobre la feria de la Magdalena. Un segundo espacio rinde tributo al CD Castellón, con una camiseta del 90 aniversario del club firmada por jugadores y entrenador e imágenes del utillero y del exjugador del Castellón y entrenador de la selección española, Vicente del Bosque.
