Administraciones públicas y empresarios coinciden a la hora de considerar a la rehabilitación de viviendas como un elemento fundamental para recuperar a la construcción provincial.

Nadie quiere volver a la burbuja inmobiliaria, pero agentes políticos y económicos son conscientes de que la construcción es capital para consolidar el crecimiento económico. Si no funciona es complicado que despegue la demanda nacional en otra actividad esencial de la provincia como es la cerámica. Nuevas edificaciones no se construirán en años, afirman los expertos, por el elevado excedente de casas por vender que acumula la provincia (cerca de 27.000). Por ello, el regreso de la construcción pasa por la rehabilitación.

La patronal del azulejo (Ascer) reivindica desde hace años la puesta en marcha de ayudas públicas al respecto. El Consell y la diputación han anunciado líneas de financiación para este ejercicio, aunque los empresarios reclaman un programa más ambicioso y que de verdad impulse las reformas de viviendas.