El juzgado de lo contencioso administrativo número 2 de Castelló ha condenado al Ayuntamiento de Torreblanca a abonar 80.000 euros a la empresa que se encargó de la ejecución de la Carrassa de Mon Rossí por la demora en los pagos de las dos últimas certificaciones de las obras. «Lamentamos que el anterior equipo de gobierno no hiciera estos pagos a tiempo a pesar de que el dinero estuviera consignado», dijo la concejala de Urbanismo, Rosana Villanueva, que añadió que esta situación «provocó un contencioso».

La ejecución del vial de la Carrassa de Mon Rossí formaba parte de las obras de conexión de los planes urbanísticos Doña Blanca Golf y de los sectores I, II, y III de Torrenostra. Esta vía une el litoral de Torreblanca con la rotonda que da acceso a la CV-13, que conecta con el aeropuerto de Vilanova d'Alcolea. Las obras debían ejecutarse con cargo a los urbanizadores de estos cuatro planes de manera proporcional al aprovechamiento correspondiente de cada sector.

El consistorio aprobó el pago de las dos últimas certificaciones de las obras de Mon Rossí, correspondientes a exceso de mediciones y al entronque eléctrico, en un pleno celebrado en septiembre de 2014. Las certificaciones fueron emitidas por la empresa en junio de 2010 y en septiembre de 2013, respectivamente. El importe total de las dos facturas ascendía a un total de 259.000 euros. No obstante, los servicios técnicos no informaron favorablemente para proceder a su pago hasta mediados de 2014.

El consistorio alegó que la empresa no aportó una copia original de la factura de la penúltima certificación hasta 2014, documento que el municipio reclamó en distintas ocasiones al representante de la empresa, que estaba en concurso de acreedores. Además, las obras correspondientes a estas dos certificaciones no finalizaron hasta finales de 2013. Mientras, la constructora exigió el importe de estas dos facturas, pagos que la corporación aprobó en septiembre de 2014.

Abono de intereses por demora

La demandante admitió el abono de los 259.000 euros durante la tramitación de la demanda, aunque mantuvo su reclamación por el retraso en el pago de las dos certificaciones pendientes. Ahora, el juzgado ha exigido al Ayuntamiento de Torreblanca que abone la cantidad de 80.000 euros en concepto de retrasos.

La mercantil ha recurrido la sentencia ya que, además de estos intereses, busca que se le abonen intereses por demora junto a una revisión de los precios. «Nos vemos abocados a pagar unos intereses de un dinero que se tendría que haber pagado en su día», lamentó Rosana Villanueva.

El proyecto de las obras de la Carrassa de Mon Rossí fue presupuestado por 3,6 millones de euros en 2006 y adjudicado por 2,7 millones de euros en 2007. En 2009 y 2010 se realizaron dos modificados en la obra por un valor total de 550.000 euros.

Los pagos de las dos últimas certificaciones de obra, la 19 y la 20, de 259.000 euros, fueron aprobados en 2014. Dos años después, el juez da la razón a la empresa, aunque exime al consistorio de pagar más intereses y la cantidad correspondiente a la revisión de los precios.