Hace dos años el obispo de Segorbe-Castellón, Casimiro López, prohibió a las cofradías de la capital de la Plana contar con los Caballeros Templarios en las procesiones de Semana Santa al recordar su histórica excomunión. En 2015 la novedad vino de la mano de dos colectivos hasta esa fecha inéditos en la procesión del Santo Entierro, la Asociación Provincial de Antiguos Caballeros Legionarios de Castellón y la Hermandad de Antiguos Caballeros Legionarios, que acompañaron respectivamente a la Hermandad Paz y Caridad y a la Cofradía del Cristo de Medinaceli. Pero la gran sorpresa vendrá dentro de una semana de la mano del primero de estos colectivos, la asociación provincial, que incluso portará a hombros la figura de un Cristo de la Buena Muerte diseñado por un artista fallero de la Vall d'Uixó.
El obispado, tan contundente en 2014 a la hora de prohibir la participación en la Semana Santa de los Templarios, guarda ahora silencio, a preguntas de Levante de Castelló, sobre la participación en la Semana Santa de la capital de estos dos colectivos vinculados a los legionarios y, sobre todo, sobre si la nueva figura diseñada por el artista fallero está bendecida y cumple todos los requisitos para salir en tan solemne procesión. «No nos pronunciamos», señalan de forma escueta.
Una voz autorizada sobre este tema es la del subdelegado de Defensa en Castelló, el coronel José Ferrer, quien deja claro que estos dos colectivos «no representan a la Legión». Al respecto, explica que «una cosa es que estos dos grupos quieran salir en la procesión, algo que nosotros no entramos a valorar y que a mí me parece perfecto, y otra muy distinta es decir que salen en nombre de la Legión, porque ninguna asociación puede representar a la Legión». Por ello, en el caso de que tanto la asociación provincial de legionarios como la hermandad pidiesen una autorización a la Subdelegación de Defensa para salir el Viernes Santo en nombre de este cuerpo de élite del ejército, «nuestra respuesta sería siempre negativa».
Otra de las cuestiones por aclarar es el tipo de armas que lucen las integrantes de estos dos colectivos, que se supone están inutilizadas o son de museo. En este aspecto, José Ferrer recuerda que corresponde a la Guardia Civil el controlar la presencia de estas armas en la vía pública, aunque desde la Benemérita estaban ayer aún pendientes de dar una respuesta a este diario sobre este aspecto.
La Hermandad Paz y Caridad, de momento, no ve mayor problema en incorporar al Cristo de la Buena Muerte de la Asociación Provincial de Antiguos Caballeros Legionarios. De hecho, en la reunión mantenida el lunes con el deán de la concatedral Santa María, Miguel Simón, junto al resto de las cofradías no se habló del tema y sólo se limitaron a organizar el Viernes Santo. Eso sí, la presidenta de la Hermandad, Rosa Guiral, considera que «el año que viene deberían salir ellos por su cuenta».
Por su parte, Carmen Forés, del Cristo de Medinaceli, volverá a contar con la Hermandad de Antiguos Caballeros Legionarios. «No nos parece mal que se incorporen a la procesión del Santo Entierro», asegura la presidenta quien, en cualquier caso, asegura que «si el señor obispo se pronunciase en contra, pues por supuesto que no saldría».
