La Junta de Festes se reunirá hoy por primera vez desde que se destapara la crisis interna, alimentada por las dimisiones de varios vocales y las quejas de dos funcionarios por supuestas amenazas e insultos proferidos por el presidente del órgano festero, Juanvi Bellido. El encuentro, que se ha convocado para hacer una valoración de la pasada edición de las fiestas de la Magdalena, se desarrollará en un clima de máxima tensión, puesto que Bellido quiere expulsar a dos miembros y el sector crítico amenaza con nuevas dimisiones esta misma semana si él continúa al frente de la junta.
El Palau de la Festa acogerá hoy a las 20.30 horas la reunión convocada por el presidente a la que asistirá todo el equipo festero, muy mermado tras las cinco dimisiones que se han producido en las últimas semanas -la más reciente el pasado jueves-. Las renuncias, algunas por motivos personales y otras por discrepancias manifiestas con la gestión de Bellido y de otros miembros de la junta, han hecho mella en la figura del presidente, quien ha decidido hacer una purga y eliminar a dos vocales que considera hostiles con el fin de acallar las críticas.
Sin embargo, aún no está claro el procedimiento a seguir para destituir a los vocales. Tanto es así que cuando Bellido planteó las expulsiones la semana pasada a la concejala y presidenta del Patronato de Fiestas, Sara Usó, ésta formuló una consulta a los servicios jurídicos para que precisen las competencias en la materia.
Las diferencias entre Bellido y algunos vocales son ya irreconciliables, por lo que desde el sector crítico auguran más dimisiones esta misma semana si el máximo responsable de la junta sigue al mando. No obstante, la reunión de hoy, cuyo motivo central es el balance de las pasadas fiestas fundacionales, no abordará el tema de los ceses, pues se intentará evitar una confrontación directa, lo que no paliará las tensiones.
Denuncia
Por otra parte, sigue abierta la posibilidad de que la funcionaria del Patronato de Fiestas lleve a Bellido ante los tribunales por las supuestas amenazas que éste le profirió en el ámbito laboral. La Fiscalía de Castelló devolvió la denuncia presentada por la Policía Local alegando que debe ser la propia afectada quien actúe ante el juzgado al tratarse de un supuesto delito leve.
