El Ayuntamiento de Jérica ha comenzado una campaña de concienciación entre el vecindario a través de la emisión de bandos donde ruega encarecidamente la restricción del uso de agua para regar y llenar piscinas ante la disminución del caudal en los manantiales que nutren la población con el fin de evitar el consumo innecesario de agua de cara a la temporada estival. El alcalde, Amadeo Edo, explicó que se trata de concienciar a la gente «de que utilice el agua necesaria, no gaste de manera indiscriminada, se llenen piscinas innecesariamente y no se rieguen a diario los jardines porque no es necesario y hay gente que sabemos que se está pasando».
Y es que, como cada verano, el suministro de agua potable durante la temporada estival en Jérica supone un quebradero de cabeza para el ayuntamiento, sobre todo durante el mes de agosto, que la población sufre un incremento importante de habitantes. Aún así, y a pesar de que el pasado verano con la fuerte sequía y el alto consumo de los ciudadanos, el consistorio no se vio en la tesitura de tener que cortar el agua durante algunas horas, este año, el alcalde ha tomado medidas porque «no nos queremos ver en la situación, ya que no hay demasiado caudal y la red de agua potable aquí es muy extensa».
Actualmente, comentó Edo, los depósitos del municipio están al 25% y estamos en la media, pero si la gente empieza a despilfarrar, de cara a agosto, tendremos problemas». Además, el alcalde explicó que se está controlando el agua del manantial de Cuaranta que en el último mes ha bajado algo y las tuberías.
Bajada del agua
El alcalde espera que cuando pase el verano se pueda comenzar uno de los proyectos más importantes de cara a solucionar este problema, como es la bajada de agua y con ello, el consiguiente aumento de caudal para Jérica desde el manantial de Magallán. Un proyecto valorado en 450.000 euros aproximadamente, que iba a empezar a ejecutarse hace poco menos de un año pero que, finalmente, la falta de financiación de las entidades autonómicas y provinciales ha dejado paralizado. El consistorio recibirá estos días la visita de los técnicos que irán a mirar si el proyecto ya redactado debe modificarse en algún tramo o si se pueden aplicar mejoras. La intervención comprende la toma y canalización del agua mediante la colocación de una tubería de 160 milímetros a lo largo de 5,5 kilómetros que baje paralela a la acequia madre.
Las negociaciones con la Confederación Hidrográfica del Júcar comenzaron en 1996 y hasta hace unos 4 años, la entidad no había dado el visto bueno a la ampliación de caudal. Sin embargo, la falta de liquidez económica y la complicación a la hora de gestionar acuerdos con todas las partes involucradas y los permisos está demorando el desarrollo de esta actuación que supondrá la garantía de agua de por vida para Jérica. Actualmente, el municipio se nutre de 11 litros por segundo de agua que surgen tanto de un pozo a doscientos metros de profundidad, del que se extraen 5 l/s, como del manantial de Cuaranta del que se obtienen 6 litros por segundo. Con esta nueva ampliación, Jérica podrá contar con 21 litros por segundo al extraer 15 l/s desde el manantial de Magallán y conservar los 6 l/s del de Cuaranta. Todo ello, de «agua caballera», sin necesidad de extraerla de ningún pozo, lo que permitirá evitar el consumo eléctrico y un ahorro importante para las arcas municipales ya que, en los últimos años, la extracción de agua del pozo supone un coste del orden de los 15.000 euros anuales.
La bajada del agua supondrá también la garantía de cara al desarrollo urbanístico del municipio, otra de las preocupaciones del ayuntamiento.
