A simple vista resulta un chico bastante discreto, pero cuando salta al terreno de juego se transforma. Alfonso Pedraza (San Sebastián de los Ballesteros, 1996) está pidiendo a gritos un hueco en el primer equipo. El joven extremo zurdo del Villarreal CF entrena a las órdenes de Marcelino García y se ha convertido en uno de los canteranos más destacados en los dos partidos amistosos que el conjunto amarillo ha disputado en lo que va de verano.
El joven futbolista es un extremo con gol y así lo demostró ante l'Hospitalet y el Nàstic, contra los que anotó dos de los tres tantos que su equipo consiguió en esos dos encuentros. Pedraza es muy trabajador y constante, es joven pero con cuerpo y eso le confiere unas cualidades que gustan y mucho al Villarreal.
Tan bien considerado lo tienen que el club que preside Fernando Roig lo blindó el pasado año -amplió su contrato hasta junio de 2019-, conscientes de que es un diamante en bruto y que puede ser un jugador importante en el futuro del Villarreal, a donde llegó en 2011 con 15 años. Comenzó en el juvenil B, pero los informes sobre él eran tan positivos que Marcelino no dudó en contar con él en algunos entrenamientos.
El técnico asturiano incluso lo hizo debutar en Primera División en el derbi autonómico contra el Valencia CF (0-0). Aquel 5 de abril de 2015 quedará en la memoria del joven extremo cordobés para siempre, igual que para los aficionados más curiosos ya que Pedraza jugó con el dorsal más elevado de la historia de la Liga: el 61.
Una vida por y para el fútbol
Pedraza tiene tan solo 20 años pero destaca por su profesionalidad ya que se pasada prácticamente todo el día en la Ciudad Deportiva. Vive por y para el fútbol, se cuida al máximo -su dieta y sus entrenamientos- y sabe perfectamente a dónde quiere llegar. Por eso raro es verlo de fiesta, como bien podrían hacer otros chicos de su edad, y mantiene una vida muy tranquila.
Aficionado a la caza, nunca nadie le ha regalado nada y ha tenido que ganárselo todo a base de mucho esfuerzo y sacrificio. Un trabajo que le ha llevado a convertirse en un futbolista muy polivalente ya que al gran recorrido en banda que tiene y a su gran capacidad goleadora ha sumado en las últimas temporadas una mejora defensiva que completa su perfil deportivo.
Aunque a él le gustaría ser a todos los efectos futbolista del primer equipo, Pedraza es consciente de que tener minutos en el Villarreal esta temporada va a ser difícil, tanto como por la competencia en su puesto -el club de la Plana Baixa ha fichado a Cheryshev - como por las exigencias de la plantilla-, así que no se descarta una cesión a un club de Segunda en busca de minutos y responsabilidad.
