Ramón Moya se aparta de la primera línea, da un paso atrás y deja su cargo de director deportivo. No se desliga del Castellón, pero casi. A partir de ahora ocupará un cargo testimonial como el de asesor externo. Es decir, que poco poder de decisión va a tener en la confección de la plantilla de ahora en adelante. Toma el relevo una persona más cualificada, más joven y con muchos más contactos por la Comunitat Valenciana que su predecesor. Se trata de Saúl Suay, que este verano ya ha llevado la voz cantante en el tema de fichajes. Casi todos los que componen el nuevo proyecto albinegro los ha traído él.

Después de fichar a 45 jugadores y tres entrenadores en dos temporadas y media, y tras indignar a los futbolistas la pasada temporada, desapareciendo de la circulación cuando se acumulaban los meses sin cobrar, Ramón Moya se aparta de la primera línea de combate. Deja de ser el directo deportivo del Castellón y se quedará, dentro del organigrama del club, para ocupar un cargo de poca trascendencia como es el de asesor externo.

Casi tres años en la entidad

Ramón Moya aterrizó en la capital de la Plana mediada la temporada 2013-14 para colgarse medallas por evitar el descenso del Castellón a Regional Preferente. Acabada esa temporada se quedó en la secretaría técnica del conjunto de la capital de la Plana y se apostó por un nuevo entrenador para el banquillo albinegro, Joan Esteva. Duró poco y después llegó Ramón María Calderé.

Saúl Suay ha sido el que ha llevado la voz cantante este verano en la planificación deportiva. Prácticamente ha sido el que ha negociado todas las nuevas incorporaciones para el nuevo proyecto. Ramón Moya se ha mantenido al margen desde que se produjo la indignación entre la afición porque Moya y el presidente David Cruz decidieron no renovar al anterior entrenador, Kiko Ramírez. Levantada la polvareda y las fuertes críticas, Moya dejó de salir a la palestra.