El Ayuntamiento de la Vall d'Uixó está convocando a los propietarios de las áreas de desarrollo Montanyeta-Fosaret y Belcaire C a una reunión en septiembre para, entre otras cosas, plantear posibles salidas urbanísticas para ambos proyectos, planteados en los años 2009-2010, pero que siguen paralizados, como recordó ayer la alcaldesa, Tania Baños.

En este encuentro Baños también quiere explicar a los propietarios de los terrenos qué sucedió con los recibos del IBI que recibieron recientemente y que ya han tenido que pagar, en los que se les reclamaba, con carácter retroactivo, la diferencia de calificación de suelo rústico a urbano de los últimos años. La alcaldesa les recordará que el PP no notificó a catastro la modificación en la calificación de ambas zonas cuando debió hacerlo, en el momento en que se planteó su desarrollo, y se esperó a remitirla en 2014, de manera que los recibos con los retrasos llegaron después de las elecciones municipales de 2015, una decisión «intencionada», según lamentó Baños. La intención es «plantear posibles soluciones urbanísticas» para unos terrenos que se consideran urbanos, cuando en realidad no dejan de ser, en su mayor parte, solares abandonados.