Hay buena voluntad, pero en ocasiones no basta. El caso de la anciana fallecida en Reus en un incendio que causó la vela con la que se iluminaba, al llevar meses con la luz cortada por impagos, refleja que hay mucho por avanzar. El Ayuntamiento de Castelló ha dado notables pasos en los últimos meses, con un convenio suscrito con Facsa, Iberdrola, Endesa y Gas Natural-Unión Fenosa por el que se les solicita que no haya cortes de suministro a las familias que tienen registradas en los servicios sociales.
De hecho, el ayuntamiento les traslada a las compañías los datos de los hogares que están bajo el paraguas del control municipal, aquellos susceptibles de contar con familias bajo la denominada pobreza energética. Pero el camino de la información no es de doble dirección ya que, a fecha de hoy, las empresas no están obligadas a informar de estas situaciones de impagos y de la posibilidad de que vayan a dejarles sin luz, agua o gas. Casos como el de Reus, paradójicamente, lejos de ayudar a revisar estos convenios para obligar a esta reciprocidad, parecen alejar esta posibilidad.
Pese a todo, la labor del ayuntamiento en lo que va de año se ve reflejada en unos números llamativos. José Luis López Ibáñez, concejal de Bienestar Social, Dependencia y Juventud, destaca que en estos meses de 2016 el ayuntamiento ha abonado a las empresas cerca de 49.000 euros para evitar cortes de agua, luz o gas. Los que se llevan la palma son los impagos por suministro eléctrico ya que, según los datos registrados en el consistorio, el ayuntamiento ha tramitado unas 208 solicitudes de familias de Castelló por impagos del recibo de la luz, lo que se traduce en el abono de unos 27.288 euros.
En el caso del agua potable, las peticiones han llegado a las 152, lo que supone 17.208 euros. Respecto al gas, ha habido 23 casos atendidos por un importante total de 2.833 euros. A esto hay que sumar casos de impagos conjuntos de luz y gas, 8 casos, que han llevado al ayuntamiento a pagar 1.517 euros. Finalmente, aparece una solicitud de gastos por la reconexión de agua, por valor de casi 114 euros.
Todas estas ayudas, como explica José Luis López, se han dado a unidades familiares que presentan claras situaciones de emergencia social, dinero que se ha abonado directamente a las sumistradoras por parte del ayuntamiento.
José Luis López señala que «en el ayuntamiento tenemos registradas seguro al mayor número de las familias que se pueden encontrar en estas situaciones de riesgo de pobreza energética, por lo que creemos que más o menos se puede estar atendiendo todas las necesidades, aunque está claro que se puede escapar algún caso». El concejal recuerda que se han encontrado con alguna situación extrema de familias que llevaban «varios años» sin agua ni luz», algo que se ha ido subsanando.
Pese a todo, insiste en que es necesario seguir avanzando, para lo que insiste en avanzar en los acuerdos con las empresas suministradoras para mejorar la información entre las partes.
Castelló en Moviment
El debate sobre este tema lo abrió en el pleno del jueves Paz Beltrán, edil de Castelló en Moviment, quien alertó de un caso, al parecer no controlado por los servicios sociales municipales, de una familia que ya ha sufrido varios cortes de luz y agua y que está amenazada por otros al no poder hacer frente a los recibos. Beltrán, que ya ha dado traslado del caso al ayuntamiento para su control, aprovechó esta situación para insistir en la necesidad de que se revisen estos acuerdos con las compañías, «a las que se debería obligar siempre a avisar de situaciones de corte de suministro antes de ejecutarlas, para que el ayuntamiento valore las situaciones de esas familias y ver cómo actuar para impedirlo».
