La división cerámica de la multinacional alemana Zschimmer&Schwarz, cuyas instalaciones se encuentran en Vila-real, ha sido reconocida, una vez más, por la Sociedad Española de Cerámica y Vidrio (SECV) con un prestigioso Alfa de Oro. En esta ocasión «por el desarrollo de un sistema de recuperación y valorización de tintas serigráficas tradicionales para su utilización en composiciones adaptadas a las nuevas tecnologías», según se especifica en el acta del jurado, compuesto por reconocidos expertos e investigadores.

El nuevo e innovador desarrollo, que ha recibido el nombre de 'eco2 Glaze', incide por vez primera y de una manera eficaz, en una problemática existente en la gran parte de fábricas de azulejos: la gestión y posterior reutilización de las tintas de las tecnologías de decoración obsoletas por la implantación masiva de la decoración cerámica digital. De esta manera, las tintas serigráficas tradicionales pueden ser reutilizadas para la coloración de esmaltes y masas a unos menores costes.

En la actualidad, y según estudios de Zschimmer&Schwarz se estima que solo en las azulejeras de la provincia de Castelló hay almacenados cerca de 9 millones de kilos de tinta que no pueden ser utilizados por obsolencia de las técnicas decorativas tradicionales. Su recuperación y posterior reutilización permite a las productoras de pavimentos y revestimientos cerámicos producir azulejos con menor impacto ambiental, al alargar la vida útil de los materiales que ya no utilizan, y, además, a un precio más bajo, lo que incide en la competitividad de las empresas.

El principal objetivo de 'eco2 Glaze', es «valorizar al máximo estas tintas obsoletas y poder transformarlas en una materia prima útil para la producción cerámica», indican Carlos Vivas y Pedro Hernández, los dos deputy general manager de la firma; quienes subrayan que el principal problema fue el de «separar los componentes».

Las tintas serigráficas están formadas por la dispersión de bases serigráficas y pigmentos en un medio llamado comúnmente vehículo. «El primer paso fue, mediante un proceso químico y un proceso físico, separar el vehículo de la parte sólida para poder reintroducirlo en los nuevos lotes de vehículo que seguimos produciendo y, con el fin de dar las máximas opciones a nuestros clientes para poder valorizar las bases serigráficas y los pigmentos nos marcamos poder reutilizarlos en el máximo de tecnologías disponibles».

Y en este caso las tecnologías que admiten esas materias recuperadas son la coloración de masas de porcelánico, en esmaltes a campana, el esmaltado mediante doble disco y la esmaltación con airless. Y a estas cuatro tecnologías todavía se le puede unir una quinta, como es la impresión digital a válvulas, «que tiene un futuro muy prometedor porque permitirá cambiar el concepto de decoración digital aportando nuevos efectos estéticos, como por ejemplo los relieves creados solo con esmaltes», explican Vivas y Hernández.

Implantación imparable

La implantación de la tecnología de decoración digital es ya imparable en el sector productor de pavimentos y revestimientos. En la actualidad se estima que hay 7.000 maquinas de inyección instaladas en el mundo, y la previsión es que en 2020 se llegue a las 12.000. De hecho, para dentro de tres años se espera que solo el 20 % de la producción azulejera mundial será decorada mediante técnicas tradicionales. «Por eso, se imponía adoptar medidas para dar salida a esa tinta almacenada», subrayan Vivas y Hernández, quienes aseguran que, además, es un proceso rentable «porque el coste medio de una tinta que cualquier fábrica tiene almacenada y sin poder utilizar es de 2,25 euros por kilo, y si quisiera eliminarla le costaría 20 céntimos por kilo. Es decir, habría invertido 2,45 euros por kilo de tinta que no va a usar, mientras que con nuestro proceso nosotros nos quedamos el vehículo para reutilizarlo y el cliente recibe de vuelta pigmentos neutros para usarlos en algunas de las tecnologías citadas».

Zschimmer&Schwarz, que da trabajo a más de 12.000 profesionales, cuenta con 28 filiales en 26 países y su facturación anual es superior a los 500 millones de euros.