Hacer posible que cualquier visitante pueda conocer la esencia de les Coves de Sant Josep en el mismo centro de la Vall d´Uixó, pero bajo tierra, ese es el objetivo del nuevo proyecto en materia turística y patrimonial que se quiere llevar a cabo en la localidad, construyendo un centro de interpretación de su mayor recurso promocional bajo tierra, en el interior de una cisterna de agua del siglo XVII de 50 metros cuadrados ubicada bajo la plaza de la Asunción.

Este pasado fin de semana se dio un paso más en un proyecto que viene dando vueltas en la cabeza del equipo de gobierno y, más en concreto del concejal de Turismo, Jordi Julià, desde que la arqueóloga municipal le explicó al principio de la legislatura que en pleno centro de la ciudad existe una cisterna «que recogía el agua de la Font de l´Anogueret, canalizada hasta el pueblo por una acequia desde 1671».

El primer paso fue saciar la curiosidad, saber en qué condiciones se encontraba y la primera sorpresa llegó al comprobar que el acceso fue sellado con hormigón en la última reforma de la plaza de la Asunción, a finales de los 90, y que la trampilla metálica con la que se cubría no se podía abrir bien. Tras solucionar los inconvenientes iniciales, se organizó un descenso para comprobar su estado de conservación, así como corroborar las medidas y características que plasmaban documentos históricos existentes en los archivos municipales.

Comprobar el estado

En este descenso, en el que participó el espeleólogo Guillem Nebot, hijo de la última persona que entró en la citada cisterna años atrás, Vicent Nebot, se comprobó con exactitud que el interior tiene unas dimensiones de 8,20 por 5,60 metros, y casi 10 de luz (o altura libre). La construcción subterránea «está cubierta por una bóveda de cañón de mampostería, reforzada por dos arcos de sillería». El fondo es de baldosa cerámica «y su estado de conservación es perfecto, solo hay algunos escombros de la última reforma de la plaza y los restos de tres cubos que se quedaron dentro cuando se eliminó el antiguo pozo en la reforma de los 50».

Esta comprobación se ha convertido en la confirmación de que el proyecto sobre el que se trabaja desde el ayuntamiento no solo es viable, sino que podrá ser una realidad en breve, de hecho, en los presupuestos de 2017 el equipo de gobierno ya reservó una partida para unas obras que permitirán que los visitantes de la ciudad tengan la oportunidad de sentirse en el interior de les Coves de Sant Josep, especialmente de la zona no visitable.

Jordi Julià explicó ayer que los arquitectos municipales ya trabajan sobre el proyecto «de creación de un acceso vía una escalera lateral y un ascensor que se ubicarán en un lateral sin que afecten a la construcción original». La idea consiste en permitir el descenso de un máximo de 15 o 20 personas que se sentarán en el centro de la cisterna para poder disfrutar de un espectáculo audiovisual «a través de paneles retroiluminados que colocaremos en las paredes donde se proyectará un video no solo con la historia de la cueva desde sus orígenes, sino también con las diferentes investigaciones que se han realizado hasta el momento». De hecho, ya se trabaja con el material que consiguieron en las últimas expediciones de espeleobuceadores, para dar a conocer los nuevos descubrimientos a los visitantes.

La idea es la de utilizar una iluminación muy tenue, respetando al máximo el entorno, para que no se pierda la sensación de encontrarse bajo tierra. Se está estudiando la posibilidad de crear una especie de abertura acristalada en la parte superior que permita ver el interior desde la calle.

El objetivo final no es solo que los turistas conozcan al detalle las singularidades de les Coves de Sant Josep, «sino que lo hagan desde el centro de la ciudad, de manera que tengan que trasladarse hasta aquí», lo que se convierte en la oportunidad idónea para promocionar el resto de atractivos etnológicos y patrimoniales de la Vall d´Uixó.

Tras el descubrimiento histórico, el pasado mes de octubre, de que el río subterráneo llegaba más allá de la conocido, una evidencia que se volvió a constatar hace un par de semanas con nuevos metros inéditos investigados, este proyecto pretende convertirse en una oportunidad más para consolidar la singularidad y el atractivo de la ciudad.