La Iglesia se ve inmersa en un posible caso de discriminación sexual en Castelló. El conocido gerente de la tienda de moda Higinio Mateu, Javier Gimeno, denuncia que la diócesis provincial ha vetado su incorporación a la Real Cofradía de Lledó por razones de su sexualidad. Gimeno, que pertenece a la Asociación de Barreros de la Mare de Déu de Lledó, está casado con Higinio Mateu y lamenta que se le niega la entrada por oficializar su relación. Esta decisión ha causado malestar en el seno de la cofradía, ya que la elección de Gimeno partió de un cofrade y en la entidad en principio no veían ningún problema. El presidente del colectivo, Ferran Barberá, indicó que la cofradía «se debe a sus superiores eclesiásticos» y que cuando les hicieron la consulta Gimeno fue descartado. «Nosotros no discriminamos a nadie», subrayó Barberá.

Estos hechos tuvieron lugar antes de las fiestas de la Magdalena, a primeros de marzo, pero Gimeno había eludido publicitarlos hasta ayer. Su caso se ha conocido este fin de semana tras revelarlo en redes sociales un integrante de la cofradía, que ha anunciado la baja de la misma por este tipo «de pensamientos retrógrados». Entonces, explicó Gimeno, un miembro de la junta que finaliza su mandato le planteó si quería sustituirle. Gimeno señaló a este diario que antes le pidió que preguntara a la cofradía. La organización trasladó su petición a la jerarquía eclesiástica y esta última le repudió alegando, prosiguió Gimeno, que en base a los estatutos de la cofradía no cumple con el modelo de familia que promulga la religión católica. Los estatutos indican concretamente que a la junta no pueden entrar «impedidos por las normas comunes de la Iglesia». Gimeno asegura que el rechazo partió del prior de la cofradía, Ignacio Pérez de Heredia.

El presidente de la entidad insistió en que han de acatar la orden de sus superiores eclesiásticos. El prior negó el veto, afirmó que Gimeno no se ha dirigido a la cofradía para adherirse y reseñó que se evaluará su solicitud si se produce formalmente, pero tanto Gimeno como el cofrade que lo propuso aseguraron que desde la cofradía le trasladaron que el prior de la cofradía negó su candidatura y adujeron que no tenía sentido formalizarla cuando en la consulta previa Gimeno había sido rechazado. La junta está compuesta por 26 hombres y 26 mujeres, se renueva cada cuatro años y para entrar te ha de proponer un vocal saliente.

El gerente de Higinio Mateu mostró su indignación y avanzó que se desligará de la asociación de barreros, encargados de portar la peana de la Verge, de la que ha formado parte durante más de diez años. Además, es una persona muy ligada a las tradiciones de Castelló; integra la gaiata 17, de la que es presidente, participa en las fiestas de la Magdalena desde hace 35 años y se presentó a las últimas elecciones de la Junta de Festes. Ayer salió en la procesión de la festividad de la Lledonera «Me rechazan porque estoy casado y soy una persona conocida; en la cofradía hay siete u ocho personas con doble vida pero no pasa nada porque lo llevan en secreto; si yo no estuviera casado no habría problema», criticó Gimeno, que advirtió que los estatutos de la cofradía también impiden el acceso a personas divorciadas. Destaca que ha recibido el apoyo de muchos cofrades y que hay quien le ha animado a enviar un carta al papa Francisco. «Barajé no salir en la última ofrenda de la Magdalena, pero la Verge no tenía culpa», aseveró.

El ayuntamiento intercede

La vicealcaldesa y regidora de Igualdad en Castelló, Ali Brancal, y el concejal de Ermitas, Enric Porcar, consideraron intolerable el trato discriminatorio denunciado por Gimeno. Porcar resaltó que aguardan una reunión con el obispado para abordar este tema y las «consignas fascistas» en Semana Santa.