La Generalitat trasladará de manera progresiva a los 21 menores acogidos en Penyeta Roja porque el centro no cumple con la normativa de accesibilidad. La decisión afecta a menores con circunstancias especiales, mientras que los de edades comprendidas entre 0 y 3 años se están asignando a familias de acogida.

La vicepresidenta del Consell y consellera de Igualdad y Políticas Inclusivas, Mónica Oltra, comunicó esta situación en la presentación un nuevo modelo de atención en centros de acogimiento infantil que contempla un refuerzo de los equipos de atención en un 61 %, y una reducción en el número de niñas y niños en cada centro. El objetivo es ofrecer una atención más especializada e individualizada, a la vez que se logran unas instalaciones que se asemejen lo más posible a un hogar.

El centro de menores de Penyeta Roja presenta deficiencias estructurales que le impiden cumplir con la legislación actual en materia de accesibilidad. Una cuestión que fue abordada por la propia vicepresidenta del Consell y por el presidente de la Diputación de Castelló, Javier Moliner, en su reunión del 10 de enero de 2017.

En esa reunión, ambas instituciones trataron la situación del centro de Penyeta y acordaron la firma de un protocolo de actuación que contempla el traslado progresivo de los menores, entre otras medidas.

No obstante, la Generalitat, como reconoció la vicepresidenta, valida el trabajo llevado a cabo por los especialistas en el centro de acogida, del cual aseguró que «funciona bien y hay un trato correcto y profesional».

La diputada de Acción Social de la Diputación de Castelló apuntó en este sentido que el edificio tiene que adaptarse a la normativa debido a su antiguedad e indicó que «la diputación está acometiendo un programa de subsanación año a año» y recordó que el coste global del centro, que incluye además el complejo deportivo, el centro de educación especial y el de educación infantil, «tiene un coste anual de 2,5 millones de euros, que asume en su totalidad la diputación sin ayudas de la conselleria».

A este respecto, fuentes de la Generalitat apuntan que la falta de certificación del centro impide a la administración valenciana la concesión de ayudas por suponer un ilícito legal.

Además del traslado de los menores por la carencia de la autorización pertinente, la conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas también ha iniciado el traslado de los menores de 0 a 3 años debido a que la legislación actual no permite su estancia en centros de acogida por un periodo superior a tres meses.

Posibles maltratos en Segorbe

La vicepresidenta del Consell informó que los niños del centro La Resurrección, de Segorbe, han sido trasladados a diferentes centros después de que en las inspecciones realizadas se detectaran «indicios de maltrato» a los menores, a quienes se daba «poca comida y caducada, que tenían que ir a recoger a los supermercados, se les alojaba en instalaciones «obsoletas, cuando no peligrosas» como el cuarto de juegos junto a la caldera.

Según inspección, hay indicios de «castigos físicos», duchas de agua fría en noches de invierno o dejarles sin comer durante horas, malos modos, faltas de respeto y abuso de poder. Además, desapareció la «libreta de diario de las chicas» que, según explicó la consellera es «como la caja negra de los aviones». «Parece que el libro de las niñas está en el mismo sitio que el libro de averías del metro», declaró.