«El ayuntamiento hace todo lo que puede». Con estas palabras la alcaldesa, Amparo Marco, analizó la situación de los procesos de desahucio que se siguen ejecutando en la capital de la Plana y las críticas recibidas por los partidos de la oposición, Castelló en Moviment incluido, por lo que consideran falta de actuaciones que palien estos hechos.

Al respecto, la alcaldesa comentó que «la Ley está para ser cumplida y los reglamentos también, y si no gustan, pues deberían interesarse en pedir el cambio de las leyes donde corresponda, ya sea en Madrid o en Valencia». Marco aseveró que el ayuntamiento «si no hace más cosas es porque no puede ya que tiene las competencias que tiene», pero insistió en que la implicación municipal es «máxima». En el último caso conocido, el de un desahucio previsto el pasado lunes en el Grau -paralizado finalmente gracias a la presión social liderada por la Plataforma Anti Desahucios (PAH), Amparo Marco señaló que en este caso «se la ha dado toda la cobertura posible por parte del ayuntamiento», aunque no aclaró hasta dónde ha llegado tal actuación.

Desde formaciones como Castelló en Moviment, a raíz de este intento de desahucio, se criticó ayer abiertamente al gobierno municipal al considerar que la Oficina de Vivienda, por ejemplo, no funciona. Por su parte, la edil de Ciudadanos (Cs) en el ayuntamiento, Cristina Gabarda, reclamó al bipartito que «actúe con eficacia para ayudar a las familias que están siendo desahuciadas». Para Gabarda, «no vale con asumir que la acción municipal no ha funcionado por falta de coordinación y voluntad política, hay que dar una respuesta a las familias que lo están pasando mal» y lograr «más ayudas para alquileres sociales, más medios para las familias desahuciadas o en riesgo de exclusión y más negociación con los bancos».